2. El escondite

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Me miraron, William extendió una mano hacia mí en forma de saludo. Y la tome con una sonrisa. Al parecer esto no sería tan, aburrido como había imaginado.

-Soy William Stone.

Mire, a la chica tenía su mirada en otro lado, como si no le importase mi presencia, y en cierto sentido eso me molestaba. William la golpeo levemente con su codo, captando la mitad de su atención.

-yo...lo siento...-se sonrojo ligeramente, dándose cuenta, de su falta de respeto hacia mí- me llamo Alice White

Me extendió la mano, como hace unos minutos había hecho William. La tome, pero no para estrecharla solamente, la tome delicadamente para alzarla hasta la altura de mis labios y dejar un escaso beso en ella, si quería que el plan resultara debía actuar sin dejar rastro, me miro e hizo una mueca, mientras William, apretaba la mandíbula. Haci que aproveche, y recordé algunas palabras para cortejar.

-permíteme decir que Alice es un lindo nombre, para una linda chica como tú.

-¿Gracias?...Supongo.

Su amigo sonrió triunfante, y eso me dio a entender, que esta chica no era de las que se dejaba engañar con unas simples palabras, aunque cualquiera estaría feliz de escuchar eso, de cualquier persona.

-bueno, ellos toman algunas clases, conmigo.

Dijo Rebeca, atrayendo la sonrisa de Alice.

-¿enserio? Supongo que ustedes dos son... ¿novios?

-¿Quiénes nosotros?

Dijo William , para mirar divertido a la chica, sabía perfectamente la respuesta. Ambos negaron con la cabeza.

-solo mejores amigos.

Alice esbozo, una sonrisa, mientras revolvía el cabello del ruloso.

-Sí, solo amigos.

William tomo a Alice de la mano, para después besarla de la misma forma que yo hice. Bufe, odiaba que copiaran mis acciones, y más cuando Alice le había sonreído a William para después depositar un beso en su mejilla. Después de ese momento de "amistad" el chico nos miró.

-hoy, habrá una pequeña fiesta, es algo así como de bienvenida, todos están invitados, haci que si no tienen nada que hacer, pueden asistir.

-¿enserio?-dijo brincoteando Rebeca- yo quiero ir. ¡Vamos!

-no creo, tengo muchas cosas que hacer ya sabes la mudanza.

-de acuerdo. De todos modos no importa si no van a esta, Will sale casi todos los días de fiesta. Haci que haya nos vemos.

Dijo ella jalando a William, Una vez que estuvieron algo alejados, Rebeca se posiciono a mi lado.

-iremos ¿cierto?

Dijo Rebeca encendiendo un cigarrillo.

-por supuesto que sí. Vístete decente, recuerda que es una fiesta de "críos"

-solo por dos años.

- Además es trabajo, no vas a ir solamente a revolcarte con cualquiera.

-espera...has dicho ¿con cualquiera?

-si ¿Por qué?

- eso quiere decir que... me revolcare con alguien en especial.

-muy lista, Rebeca –le arranque el cigarro de los labios, para llevarlo a los míos- necesitare que distraigas a alguien.

-ok entonces nos vemos haya.

-¿sabes, donde será la fiesta?

-claro, todos hablan de eso, y antes de que ellos nos invitaran, lo hicieron otras personas, y a ellos si les pedí la dirección.

El asesino (EDITANDO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora