Messenger Love

C u a r e n t a y n u e v e

Estoy en su auto, todo el camino fue en silencio. Tengo un nudo en la garganta y estoy nerviosa de lo que podría preguntarme.

Conduce apretando fuertemente el volante, está furioso, lo noto. Por lo menos no vamos rápido. ¿Pero porque se preocupa? ¿Qué le importa a él lo que me pase? Lo más probable es que lo ha hecho de buena persona, si...debe de ser eso. No le encuentro otra razón.

Hemos llegado y el vehículo hace un ruido extraño en cuanto se detiene. Se muerde el labio y me mira. Va a decirme algo...y no creo que sea bueno.

-¿Porque no me dijiste?- pregunta calmado, pero es el tipo de calma antes de la tormenta.

-¿Porque tendría haberlo hecho?- contestó desconcertada.

-¡Maldición Lia! ¡Debiste haberme dicho algo al menos!- dice golpeando el volante.

-¡No me grites! Además, no tenía porque hacerlo- me encojo de hombros sin importancia.

-Si tenias porque...- suelta un suspiro -Con que hubieras dicho que necesitas ayuda habría bastado.

-Aja si, claro. Como si de la nada llegara y te dijese: "Oh Evan, adivina que. Me hacen bullying, ¿Cómo la ves?" Debes de ser estúpido si crees que hubiera hecho eso-  digo con sarcasmo.

-Lia...

-¡Si ni siquiera te importo!- gritó exasperada.

-¡Claro que si! ¡Joder!- se agarra el cabello frustrado.

-¡Callate! ¡Mentiroso!- comienzo a golpearlo en el pecho furiosa pero me detiene con sus manos.

<<¿Desde cuando tiene manos tan grandes?>>

Las besa y me quedo helada.

<<¡Maldito pervertido!>>

-Nunca te mentiría...-susurra acercándose a mi, tan cerca que puedo sentir su aliento en mis labios.

Un movimiento mas y...

Logro reaccionar.

Le doy una cachetada.

-¡Te aprovechas de mi!- suelto mi cinturón de seguridad y solo quiero salir de su estúpido auto, me sostiene del brazo -¡Suéltame!- no responde nada -Juro que si no me sueltas ahora mismo, lo vas a lamentar- accede a dejarme ir.

-Quédate un minuto, aun no te vayas por favor- suplica.

-¿Y porque debería hacerlo?

-Lia..yo...- junta los dedos entre sus manos -¿Recuerdas la vez que te dije que para mi eras un reto y me atraes solo por tu cuerpo?

-Si- gruño.

-B-bueno, mentí... en parte, si me atraes por tu cuerpo pero no es solo por eso...

-Aja si, ¿Y que se supone que es?- arqueo una ceja.

-T-tu, me gustas Lia...- susurra muy bajo, tan bajo que creo haber escuchado mal.

-Claro y eso debo creérmelo, buena broma Evan- le digo antes de bajar dando un portazo a su auto.

Camino hacia mi casa encolerizada, me aferro a la mochila conteniendo las lagrimas. 

<<No tenia porque jugar conmigo así...>>

Abro la puerta y doy un vistazo hacia atrás, el auto sigue ahí. Inspecciono la sala y no hay nadie.

-Hola- digo y se hace un pequeño eco.

<<Gracias al cielo no hay nadie>>

Corro a mi habitación subiendo las escaleras y tiro la mochila en la cama, voy al baño para ver que tan mal se ve mi rostro. El espejo esta algo sucio y tengo que limpiarlo un poco. Observo lo que hay enfrente mio y es inevitable que llore. 

-¿Porque?- me pregunto a mi misma en voz alta, seco mis lagrimas despacio y busco un poco de base que compre. Escucho un motor arrancar y suelto un suspiro.

(...)

Espero la pizza que ordene, ya no parezco un monstruo y  tengo puesto el pijama. Miro lo que hay lo que programas que hay por mientras. Mis padres no han llegado aun y me estoy preocupando, bah que cosas pienso, de seguro que deben haberse quedado hablando con la Sra. Margott acerca de las canciones que tocaran próximamente. Llueve cada vez con mas fuerza, y no me molesta realmente, de hecho me gusta mucho la lluvia.

Por fin llega mi comida, abro la puerta y encuentro un chico empapado con mi pedido en la mano y una sonrisa. 

-Son siete dolares con veinticinco- me la entrega y la dejo en la mesilla de al lado, rebusco entre mi billetera y encuentro por fin el dinero.

-Toma- le devuelvo la sonrisa. 

-Pero me has dado diez- frunce el ceño.

-Por la lluvia- miro hacia afuera -Quédate con el resto- le vuelvo a sonreír. 
-Gracias...- contesta confundido.

-No hay de que- dicho esto cierro la puerta. 

Agarro la pizza y me siento en el sofá,  como durante la película. Extraño a Blue, me encantaría que estuviera aquí para reírnos de los cliché que son esos filmes románticos. 

Escucho la llaves y veo al cerrojo moverse, mis padres entran con un paraguas hecho pedazos y una cara de alivio. 

-Hola, cielo. ¿Que comes?- se rie, mi madre. 

-Pidda- contesto con la boca llena y aun viendo la televisión.

-¿Lia, que hemos hablado de hablar con comida en la boca?- arquea una ceja mi padre.

-No hay que hablad  con la boda lleda- vuelvo a responder la misma forma y se limita a negar con la cabeza riendo. Van a la cocina y yo me quedo nuevamente sola.

<<Como me gustaría contarles lo que me pasa...>>

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Oops! Sin querer publique el capitulo antes de que estuviera listo xd 

Pero ahora si damas y no tan damas, también caballeros (de los pocos que hay) tienen el capitulo 49 a su disposición. 

¡Mañana se reanudan las actualizaciones! 

Lof para todos

Cambio y fuera

-Kata