Narra _____.
Despertaba desorientada y aturdida, los rayos del sol molestaban intensamente mis ojos, no sabía en donde estaba, la noche anterior había ido a un bar, a lo cual me daba la idea de que me había pasado de copas, me talle los ojos con las manos y sentí algo duro y frío cuando mi mano hizo el contacto, la mire, tenía un anillo en el dedo anular, espera... ¿un anillo? No recuerdo haberme puesto tal accesorio, pase mi mano por mi cabello y sentí una tela reposa, le toque varias veces para identificarla, me senté rápidamente en la cama, eso me mareo un poco, cuando el mareo paso me observe bien, ¡estaba usando un vestido de novia! ¡¿que demonios paso anoche?!
Sentí que algo se movió a lado de mi y voltee a ese lugar, había un chico, vestido en un traje negro, me asusté, no conocía a ese chico, en realidad nunca lo había visto en mi vida, no podía verle la cara ya que estaba acostado boca abajo, me levanté de la cama y comencé a buscar mis cosas pero no las encontraba en ninguna parte, hasta que vi en una mesa a lado de la cama mi celular, lo tomé e intenté encenderlo, no tenía batería, no había cargador así que no podía hacer nada más.
Escuché que el chico hizo un sonido extraño y voltee a verlo, se había volteado y tenía un brazo en sus ojos, se los froto con ambas manos al parecer también sintió algo extraño y se miro la mano, rápidamente se incorporó mirando sorprendido el anillo que el también tenía en el dedo anular, volteo hacia donde me encontraba, ahora si pude ver su rostro, ojos un poco grandes pero razgados, labios gruesos, cabello castaño y suave, un poco largo, me miro hizo un movimiento extraño como si lo hubiera asustado, yo tenía cara de espanto.
-Eh... ¿Hola?- fue lo primero que dijo y yo quedé desconcertada, no respondí, estaba prácticamente pegada a la pared como gato asustado- ¿Hello?- hablo en inglés.
-Se coreano- dije y el sonrío, tal vez de vergüenza.
-Lo siento, es que te ves...- me hizo una seña de arriba a abajo con la mano.
- Soy extranjera- dije con un poco de nerviosismo.
- Se nota - volteo su vista a su ropa y tomo una parte del saco para verlo mejor, se veía confundido y yo también lo estaba- ¿sabes lo que paso? -volteo a verme de nuevo yo negué con la cabeza, de repente algo comenzó a sonar, el chico sacó su celular y lo contesto- ¿Hola?, ¿como? ¿Que ya está listo? ¿de que habla?... ¡¿mi registro de matrimonio?!, no, esto debe ser un error- espero un poco en la linea- si, mi nombre es Kim Seok Jin pero... ¿Hola?- dijo y miro si teléfono, algo me decía que se cortó la llamada, tenía una expresión aún más confundida- ¿podrías decirme tu nombre?- pregunto.
- Eh... Si, me llamo____(Tn y apellido)- el miro a la nada como en estado de shock.
- Estamos casados- comencé a ahogarme con mi propia saliva.
- ¡¿Que?!-grite con todo el aire que tenía en mis pulmones, genial, un día despierto en un lugar desconocido de Corea del sur y casada con un desconocido, vaya despertar.
Me encontraba sentada en una de las sillas que se encontraban en la recepción del hotel en el que habíamos parado, ese tal Jin había hecho unas llamadas y nos habían traído ropa, miraba como hablaba con la recepcionista, no había notado lo alto y delgado que es, me levanté y me mire en uno de los espejos que estaban ahí, yo era una enana y a como se veía yo pesaba más que el.
-¿Que estas haciendo?- pregunto cuando se posó a mi lado.
-Eh... nada- dije rascándose la cabeza con nerviosismo.
-Vamos a comer, tengo hambre y se que tal vez tu también tienes- tenía razón, me moría de hambre.
- De acuerdo.
Cuando fuimos al restaurante del hotel veíamos que cosas ordenar me dieron ganas de ir al baño.
- ¿Me disculpas un momento?- el me miro y como por arte de magia supo o lo que me refería pues no pregunto nada.
-Adelante.
Fui al baño, hice mis necesidades y regrese de nuevo al restaurante, me llene de sorpresa al ver el montón de comida que había en la mesa.
-Eh... ¿Porque hay mucha comida? - me miro con un poco de timidez.
- Es para mi- abrí mis ojos de par en par, ¿como es posible que pueda comer tanto?, no dije nada y me senté, veía como el tomaba el primer platillo y comenzaba a comer, de unas bocanada grandes, me quedé impactada a la rapidez en la que comía y de las grandes cantidades de comida que se metía a la boca, vaya día extraño.
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Hola.
Soy una nueva army que quedó fascinada con el princeso rosa de Jin que hasta me dieron ganas de hacer un fic de rayis, de verdad espero que les haya gustado el primer capítulo y si les gusta comenten para poder continuarla^-^.
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