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13 de Julio de 2016
Habían pasado 4 meses desde la última vez que escribí en mi diario, sentía que no necesitaba escribir tanto de mi vida.
Yo llevaba 2 meses de relación con Matias, éramos felices y nada nos impedía eso. Pero todas las noches pensaba.
-¿Fue buena desicion elegir a Matias? ¿Debería haber elegido a Joaquín? Era el más lindo y el más simpático del curso, buenas notas y buena relación con los profesores... No, que estoy pensando, quiero a Matias tal y como es.-
14 de Julio de 2015
Llegué al colegio feliz como siempre, deje mi mochila y me fui a sentar al lado de Matias, le di un beso en la mejilla y le pregunté cómo estaba, comenzamos a hablar y el me puso el brazo al rededor del cuello, fue tan tierno. De todos modos no me sorprendía, todas las mañanas haciamos lo mismo.
Hoy pasó algo raro, algo que nunca me había pasado.
Tocaron la puerta para entrar y grite "Pase". Cuando abrieron la puerta me di cuenta de que era Joaquin, no sé cómo, ni porque, le saque el brazo a Matias. Lo mire con cara de disculpas pero me miro un tanto enojado.
-Lo siento no se porque hice eso...- Le dije.
-Acaso no quieres que te vea Joaquin conmigo o que?- Me contestó.
-No, no es eso... Pero...-
-Sabes, no importa.- Se paró y se fue.
No entendía porque se enojaba tanto, solo le saque el brazo, no fue nada grave... Aunque fue mínimo en mi punto de vista, me dolió que hubiera dicho eso.
Estaba tendida sobre la mesa y quería gritar. De la nada se acerca Joaquin y se sienta.
-¿Se puede, o tiene dueño?- Me dijo bromeando.
-Jajaja si por supuesto.
-Me di cuenta que le sacaste el brazo a tu pololo cuando llegue. Pasó algo? Hice algo malo?
-No, para nada, solo que... Cuando te veo siento que mi mente se revuelve. Yo estoy con el, y lo elegí. Pero tú sigues enredando a mi corazón.
-Tu nunca dejaste de ser la dueña de mi corazón, desde que llegue no dejo de pensarte.- Me miró y me besó apasionadamente.
No pude hacer nada, yo también quería seguir con ese beso, fue un beso muy largo, que no quería que se acabara, pero tuvo que llegar a su fin. Fue todo por Matias, a mí me dio por mirar hacia la puerta y estaba el mirándonos fijamente con lágrimas en los ojos.
-Sale de ahí Joaquin.- Gritó
Joaquin se paró rápidamente y se acercó a Matias.
-Lo siento, fue mi culpa, ella no hizo nada.- Dijo lamentándose.
Yo estaba de lado de Joaquin. Después de ese beso me di cuenta que lo quería a él.
-Sofia, Sofia, Sofia...- Escuchaba.
De donde salía esa voz? Era mi hada madrina? Mi mente? Que era?
-Sofia despierta, es tarde.- Era mi mamá.
Abrí los ojos y me di cuenta de que todo era un sueño, me sentí triste pero un poco aliviada. También me dio un poco de risa, era totalmente imposible que sucediera todo eso.
-Por suerte...- Dije aliviada.
-Por suerte que. Sofia mira la hora, son las 7:40, levántate.- Me dijo mi mamá desesperada.
Era el sueño más largo que había tenido en mi vida, pero fue de esos buenos.

Llegue al colegio a las 8:10, faltaban 5 minutos para comenzar con la clase. Subí corriendo, pero de todos modos ya estaban todos sentados y callados.
Toqué la puerta suavemente, la abrí y pasé. Me fui a sentar a mi puesto de todo el año, al lado de Joaquin.
-Hola.- Me dijo.
-Hola... Dijieron algo en especial?- Le pregunté.
-No, pero hicieron un cambio, no sé si te guste mucho.
"Porfavor que no se Matias con Martina, porfavor que no, porfavor que no." Pensaba.
-Matias con Martina.- Concluyó.
Miré por toda la sala para verlos. Ahí estaban, al final del pasillo, juntos los dos riéndose. Me dio tanta rabia verlos así... Yo sabía que a ella le gustaba, pero tenía miedo por parte de él.
Quede mirándolo haber si él me miraba de vuelta, hasta que lo hizo.
A penas me miró, la sonrisa se le fue de la cara, le hizo un gesto a Martina y miro su cuaderno.
Preferí no darme vuelta nunca más y conversar con Joaquín, si finalmente el también me gustaba. ¿Finalmente si? Parece que si, lo pensé muy naturalmente.
Conversamos y reímos tanto que nos tuvieron que echar. Antes de salir, mire hacia al fondo, para ver a Matias. Él me estaba mirando con una cara de odio que me dio hasta miedo.
Cuando salimos, nos sentamos y seguimos riendo como locos. Creo que nunca me había reído tanto en un día, nisiquiera con Matias, y creo que eso no estaba bien.

Tocaron el timbre para salir a recreo y me quede en la puerta esperando a Matias. Cuando salió lo tome del brazo y le pedí que hablaramos.
-No quiero hablar ahora, quiero aclarar mi mente un poco.
-Aclarar que?-
Me miró y se fue.
¿Aclarar que? ¿Ahora le gustaba Martina? Ojalá que no.

Llegué a mi casa a las 5:30, me fui a mi habitación y abrí whatsapp, necesitaba hablar con Matias.
-Mati estás ahí?
-Si.
-Me puedes explicar que pasó?
-No tengo nada que explicar, solo quiero aclararme.
-Pero aclarar que... Se supone que estamos bien.
-Se supone... Pero no puedo estar bien si a ti te gustan dos.
-Que? (VISTO)

¿Cómo se enteró Matias de eso? ¿Fue Martina? Necesitaba averiguarlo.
-Martina, ¿Tú le dijiste a Matias que me gustaba Joaquin? Eras una de las personas que sabía y estuviste todo el día hablando con el.
-Si, lo siento, necesitaba contarle... De lo único que hablaba era de porque te reías tanto con Joaquín.
-¿¡Cómo pudiste?! Si mi relación se acaba todo será tu culpa.
-Lo sé, lo tengo clarísimo.
Apague el celular y no deje de pensar en qué pasaría mañana. Solo pensaba en lo que me diría Matias.

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