Girls like girls.

Confusa.

Me desperté mucho antes que Catherine, era domingo, me quede mirando el techo pensando, desde que Catherine me besó no pude dejar de pensar en ese beso. Sus labios eran jodidamentes suaves, me apetecía volver a probarlos, lo raro es que a mi nunca me han atraído las mujeres.

Escuché unos pasos, Catherine se había levantado así que yo también decidí levantarme.

- Buenos días Catherine.

- H-Hola Ashley. Oye, lo siento por lo de ayer...

- No, no pasa nada Catherine.

- Pero a ti te molan los tíos y no sé, supongo que te sentirías incómoda, pero no pude resistirme joder.

- Espera Catherine, yo...

Me quedé muda, no sabía que hacer ni decir, es verdad que fue incómodo, pero me gustó al fin y al cabo, quería volverla a besar.

Así lo hice, la besé, sus labios eran suaves y geniales, joder parecía un momento mágico. Me aparté de su boca.

- Voy a ducharme Catherine.

- Yo te prepararé el desayuno, pequeña.

Repitiria ese beso una y otra vez. Cogí una camisa de cuadros roja y negra, unos pantalones negros y zapatos, me metí en la ducha, mientras el agua iba cayendo en mi, pensaba, por mucho que me gusten sus labios, ella... ya no sé ni a quién puedo querer, si a chicas, o a chicos, o los dos... Me sentía confusa.

Me salí y vestí rápido, me fui a desayunar con Catherine.

- ¿Que hacemos hoy? - Preguntó Catherine.

- Juguemos a videojuegos toda la tarde, juntas.

- Vaale, lo pasaremos bien.

Desayunamos y nos pusimos a jugar, todo estaba perfecto.

- Eres muy buena Ashley, pero esta vez te voy a ganar.

- Ya claro.

- Verás.

La iba a ganar, de nuevo, hasta que para despitarme me besó, otra vez ese cosquilleo, me distraje siguiéndole el beso que me ganó.

- Eso no se vale Catherine, jope.

- Pero te he ganadado. - Dijo sacando la lengua.

Seguimos jugando a otros juegos, abrazadas, era genial, pero yo aún seguía confusa con todo esto...