Capítulo 1

1.3K 25 1
                                    

Abro la persiana de mi habitación haciendo que los rayos de sol atraviesen la ventana y mis párpados ,cansados por el trabajo del día anterior, se cierren automáticamente por la luz.

Entro al baño y me ducho, odio ducharme por las mañanas ya que el agua caliente hace que tenga aún más sueño pero al estar en verano, el agua fría hace que cada músculo de mi cuerpo se agarrote haciéndome pegar un chillido y acabando de despertarme.

Después de la ducha me cambio y me pongo la ropa de trabajo, me peino y pongo la comida de ese día un un tupper para luego guardarla en mi bolso. Cojo las llaves del coche y bajo las escaleras tranquilamente.

Al salir del edificio miro la calle donde vivo, aquí en Barcelona todos los lugares me parecen casi mágicos, con luz y muchísima gente por las calles. Me miro en el retrovisor y río en voz alta. "Menuda presumida" digo cantando mientras enciendo el coche y pongo la radio. Me pongo mis gafas de sol y canto en voz alta la canción que suena.

Llego al hospital y aparco. Entro por la purta y saludo a la enfermera que pasa por mi lado. Paula me saluda con una sonrisa en la boca y me acompaña hasta la planta donde trabajo.

-No tienes ni idea Lau, he oído que Marc se ha acostado con Cristina. Te juro que he flipado-dice la peliroja mientras estamos en el ascensor.

-¿Me estás escuchando?- asiento y continúa- ¿Qué tal estás tú? ¿Las fiestas?

-Todo bién, mis padres igual de encaprichados en que consiga pareja o que estudie algún extra. Pero ya sabes, no me apetece estudiar nada por ahora. Mi especialidad me gusta y no le veo sentido estudiar por estudiar- ella asiente y ríe moviendo las cejas.

- No me molestes cabrona. Estar soltera no es lo mejor del mundo pero sigo viva así que...

Paula niega con la cabeza y habla de la Navidad con su novio. La cena que le hizo y la sorpresa para el postre. Para cuando acaba hemos llegado a mi planta y me despido con la mano.

-iQuiero saber como está él!- mientras se marcha en otra dirección sin decirme adiós.

Menuda chica. Río en voz alta y me meto a cambiarme. Al acabar cojo mi tupper con la comida y camino hasta el "pequeño comedor", donde solo hay una pequeña cocina, microondas,nevera y una mesa con cuatro sillas para los descansos. Al entrar veo a Marc y saludo con la cabeza. Pienso en irme de allí pero su voz me detiene.

-¿Qué tal las fiestas?- dice con voz cansada. Me giro y le sonrío un poco.

-Supongo que bien, ya sabes, como siempre. ¿Las tuyas?- me mira un poco y añade.

-Supongo que también-se levanta y sale por la puerta pasando por mi lado-Suerte con la jornada. Nos vemos.

"Gracias" sale de mis labios pero supongo que él no lo oye ya que está lejos de mí.

-Doctora necesitamos ayuda en esta habitación- miro en dirección de la voz y asiento. Mi jornada empieza.

Me siento agotada en el comedor ya con mi comida delante y una botella de zumo. Bebo un poco y suspiro pensando en todo lo que me queda por hacer. Suspiro otra vez y miro por la ventana. Desde aquí veo Montjuic que es donde vivo. Miro mi móvil, podría llamarle ahora pero no cogería el teléfono, pienso en enviarle un mensaje pero me quito la idea de la cabeza. Él apenas tiene tiempo de sentarse. Oigo la puerta abrirse y veo a Paula saludándome.

-¿Qué tal ha ido?-pregunta mientras abre la nevera y coje su comida.

-Como siempre. La quimio no funciona y el tumor sigue creciendo. A la niña del 5o se le ha reducido pero no debe faltar nada para que crezca el doble. ¿A ti qué?- la enfermera sopla enfadada y se sienta enfrente mío.

-Pues peor. Marc se me ha acercado a hablar. No le soporto. A parte de eso. El de leucemia lo ha pasado fatal en la quimio así que me he quedado con él. ¿Sabes si mejora?- niego con la cabeza y miro a mi amiga.

En esta profesión nunca hay que encariñarse con ellos. Voy a responderle cuando continúa hablando
- ¿Cómo está?

-Ya sabes como es. Trabaja y trabaja. No para. Luego le iré a visitar. Se siente como que hace años no nos vemos-niego con la cabeza y cierro mi tupper. Para luego beber mi zumo.

-He oído los rumores... ¿Qué piensas tú? Y no me digas que te da igual-afirma la peliroja mientras me levanto y camino a la puerta. Al llegar a ésta me giro y digo un poco cabreada.

-Ya sabes, es su vida Pau, en cualquier caso los rumores son rumores... La mayoría de veces mentiras. Me voy a seguir currando, nos vemos luego.

Al salir oigo un "iiNo niegues que está caliente!!" Me río mientras niego con la cabeza. Mi amiga está loca. Él es mi amigo. No le veo de ésa forma, todo el mundo piensa que sí pero nos conocimos por coincidencia y para evitar un buen lío de prensa pensamos en mantenerlo en secreto.
No imposible pero si complicado ya que él muy conocido.

Oigo un "doctora" y saco mis pensamientos de la cabeza concentrandome en el niño que está en una habitación blanca y el sonido de ese maldito aparato donde hay un 0. Maldigo y me pongo los guantes a velocidad rayo antes de coger los desfibriladores y gritar un "Un, dos, tres. Ahora"

*************

Subo al coche agotada. Introduzco las llaves y digo en voz alta. "Voy a llamarle". Dudo un poco al principio pero luego busco su contacto y aprieto en llamar. Un, dos, tres, cuatro, cinco tonos suenan hasta que oigo su voz masculina.

-iLaurita!

Mis Dos DeseosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora