Cap. 6

8K 76 2
                                    

Estaban todos justo donde los quería... Mis amigo en clase, Honna explicando y la cámara oculta la tenía Naira enfocando hacia ella.

Entonces, mi malévolo plan se puso en marcha.

- Honna... - Dije temblorosa.

- Si, dime Esther.

- ¿Puedo ir al servicio?

- Si pero no tardes mucho.

Creo que lo que tarde no importara demasiado...

Entonces me levanto y voy al baño, con una revista... Adulta... (Ejem.. Porno) Pero haber como consigo hacerlo sin que los niños pequeños que también usas él mismo baño no estén dando por culo.

- ¡Ni se te ocurra dejar grabar! - Le dije a Naira.

- ¡Esto es oro tía! ¡No pienso dejar de grabar por nada!

- Así me gusta.

Me levanto y voy hacia él baño. Cuando llego, me meto en él ultimo váter y sigo él plan.

No hay niños, así que... Empieza la fiesta.

Abro la revista... Levanto la falda... (Ya os podéis imaginar él resto...)

Me di todo lo mío durante unos seis o siete minutos y luego voy a clase muy cansada y con él brazo dolorido, pero valió la pena ver la cara de Honna cuando volví a clase.

Honna estaba sentada en su sitio con la cabeza baja, y jadeando... ¡JADEANDO!

Me quede un rato mirándola, con una sonrisa en la cara, hasta que vi que los demás estaban mas o menos igual pero disimulando, también me di cuenta de que yo estaba igual, pero a mi no se me notaba.

Me preocupe de que hubiera sido demasiado éxtasis para ella, (por que me lleve un vibrador y lo utilize de una manera casi satánica) así que me hacerque a ella.

- ¿Honna? ¿Esta bien?

- Si si... ¿Por?

No sabia que decirle. ¿¡Como le voy a decir que esta jadeando y todos los de la clase se dieron cuenta!?

- He... No... Por nada.

Y me fui a mi sitio.

Por la tarde, a la Salida del Colegio:

Estaba caminando por la calle. Estaba con Elisabeth.

- ¿Oye me acompañas tía a mi casa? - Dijo Elisabeth.

- Ahora no puedo tía, tengo que ir a casa pronto.

- ¿ Y no vas a hacer la operación Honna?

A operación Honna es quedarse en la esquina del colegio hasta que Honna salga con su hija y luego seguirla hasta que entre en él garaje donde tiene él coche mientras nosotras nos dirigimos a nuestras casas.

- Hay es verdad... Se me había olvida...

Entonces se ve a Honna saliendo con su hija, mientras que a mi se me corta la respiración.

Entonces, disimulo mirando hacía los pies de Elisabeth.

- Mira mira, hay esta tu amada jajajajaja...

- ¡Ya lo se! ¡Disimula gilipollas! - Yo le digo esas cosas cuando estoy nerviosa, pero nunca se lo digo con maldad. ¡Es que si viene la persona que te gusta y tu amiga la mira y la señala, que te crees que le iba a decir!

- ¡Que viene para acá!

- ¡Seguro que no!

- ¡Que si tía!

- ¡Que te calles!

- Mmm... Esther, ¿puedo hablar contigo un momento?


Las Pastillas Amorosas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora