No podía negárselo, tenía que decírselo.
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"Pelirroja mía"
Short StorySi mi boca dijera lo que mis dedos escriben, me voy a la cárcel por cursi. -Un amante de su rojo.
Sesenta y seis
No podía negárselo, tenía que decírselo.
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Si mi boca dijera lo que mis dedos escriben, me voy a la cárcel por cursi. -Un amante de su rojo.
No podía negárselo, tenía que decírselo.