Cap.3

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Este ha sido oficialmente el peor día de mi vida, mi nuevo instituto es una basura, la cocinera me ha servido la comida con una cuchara con la cual se ha rascado su enorme culo y encima esa tal Dakota y su amiga me han criticado en el baño.

Durante el resto de las clases no me pude sacar de la cabeza lo que dijeron esas dos mojigatas, ¿tan repelente soy?...¡Pero si soy un amor de persona! Y encima Dakota se ha pasado el día mirándome con cara de niñita inocente que nunca ha roto un plato, pero por muchas miradas que me eche, ella no se va a librar de la furia de Chanel Lavoisier.

¡Por fin ha terminado las clases! Ya puedo ir a mi odiosa casa y ponerme a hablar por Skype con mi querido Ethan, y contarle lo insufrible que ha sido mi primer día de clase. Fui caminando por el mismo camino por el cual había ido esta mañana, no paraba de pensar en lo que me dolían los zapatos por los tacones y que ya no tenía a mi chofer privado para que me llevara a donde quisiera.

''Este día no puede ir peor''– Pensé para mis adentros.

De repente noto como una gota cae en mi precioso cabello...no puede ser... está lloviendo, y lo peor es que...¡Me voy a ensuciar los zapatos de barro!

''¿Se puede saber para que dices nada Chanel?''–Me dije interiormente.

Sigo caminando por un rato, mojándome por la lluvia y maldiciendo a Dakota y Melissa por el camino, cuando de repente, veo que una camioneta azul se para justo a mi lado.

–¿Quieres que te lleve?– Me dice alguien a quien no consigo ver.

–No es por nada, pero un tipo me dice que me lleva a mi casa, mientras llueve, en una siniestra camioneta. No inspira mucho confianza– Dije pensando que a lo mejor se iría pero no...oigo como se ríe.

–Tranquila– Baja el cristal– No soy ningún viejo verde, además vamos al mismo instituto, ¿Chanel verdad?– Me dice mientras me sonríe.

Debo de decir que el chico no esta tan mal, no se compara con mi Ethan, pero no es feo. Accedí a montarme en su camioneta. Ya dentro lo pude ver mejor, tenía el pelo de color marrón oscuro, y los ojos del mismo color. Comenzó a conducir, había un silencio un tanto incomodo, hasta que él hablo:

–Soy Tyler por cierto, Tyler Walsh– Dice mientras me mira de reojo.

–Yo Chanel, Chanel Lavoisier– Estaba un poco nerviosa, y no tengo ni idea de cual es el motivo.

–Lo se, vamos a algebra juntos– Afirma mientras se ríe– ¿Qué tal tu primer día?–La pregunta del millón...

–Bueno pues bastante bien, todos piensan que soy una princesita, la cocinera me ha servido la comida por la cuchara con la que se rasco enfrente mía el enorme trasero que tiene...¡Ah! Y por si fuera poco dos chicas me estaban criticando en el baño– Uff, necesitaba contárselo a alguien.

Él solamente se limita a reírse, cosa que ya me tiene un poco alterada...

–No todos lo piensan, yo no te veo así, solamente eres alguien que intenta encajar– En cierta manera me comprende, y no puedo evitar ruborizarme un poco.

–¡Es aquí!–Digo rápidamente para salir de ese coche lo antes posible. Tyler se quedo mirándome un poco confundido por unos segundos, pero después reprimió una pequeña risa.

–Bueno, hasta mañana...vecina– No entiendo que quiere decir con eso.

Yo me limito a caminar hasta la puerta de mi casa, pensando en lo que me acaba de decir, cuando miro a la casa de al lado y veo que entra en ella...

''No puede ser...''– Pensé mientras miraba boquiabierta a la casa del al lado. Si no fuera suficiente, el primer chico que me ha hecho sentir incomoda y ruborizarme es mi vecino...¡Estupendo , pensaba que había tocado fondo, pero no!

Entro en mi casa y voy directa al intento de habitación que tengo, ya era la hora a la que habíamos quedado yo y Ethan para hablar por Skype, y a él no le gusta que le hagan esperar. Me senté en la silla y enciendo el ordenador, veo que esta conectado lo cual hace que me ponga ligeramente contenta, pero al instante de decirle ''Hola'' se desconecta. Me ha dejado en visto, a mí. Pero no me extraña que quiera pasar de mi, ahora soy una pobretona y él es el heredero de una gran multinacional.

Me acuesto en mi cama reflexionando, por primera vez en mi vida, pensando en todo lo que había pasado hoy, hasta que miro a través de la ventana de mi cuarto y veo a Tyler, pero lo peor es que...¡ está sin camisa! Cuando veo que va a mirar por la ventana, me escondo, mientras me doy vergüenza a mi misma...

Solamente espero que mañana sea un día mejor, y hacerle pagar a esa mojigata por lo que me ha hecho. De repente, paso de la vergüenza a la ira, como dije yo no soy de las típicas chicas de las novelas que se creen diferentes y quieren al chico guapo de turno, yo soy la chica mala, la que va a hacer la vida imposible a Dakota Johnson....



Cómo ser una chica malaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora