QUINCE DÍAS CON ÉL - sTaXx & Tú #1°

DÍA #8

DÍA #8: Cita doble inesperada.

¿Qué hay, mundo?, yo estoy aqui, odiándote un día más por obligarme a despertar temprano para ir a la universidad.

—¿Y esa cara?—pregunta Daniel sentándose a mi lado en el almuerzo.

—La única que tengo —él me sonríe falsamente dándome a entender la falta de gracia en mi respuesta —. Ya no me haz hablado de Nathalie, ¿siguen juntos?

—Aunque suene increíble, sí —respondió e inmediatamente sus ojos tomaron un cursi brillo —. Nath se ha vuelto muy especial —suspiró.

—Eres empalagosamente cursi —reí —, solo ten cuidado, por parte todo esto me da miedo, no quiero que nadie te lastime.

—Aunque es algo tierno, pienso que no es necesario tener miedo, es simplemente una pérdida de tiempo —fruncí el ceño, un poco dudosa de lo que acababa de decir—. El temor a arriesgarte, no te ayudará a saber si algo terminará bien o mal, solo lo sabrás intentándolo, y créeme que eso no lo entiende cualquiera.

Sus palabras me hicieron pensar, haciendo que no note la repentina llegada de mi otra mejor amiga.

—Al fin se calló el profesor Calvin —suspiró ella, y dejó la bandeja con su comida sobre la mesa —. La química no es lo mío.

—Ni la física, ni la matemática, ni la biología... —se burló Daniel y yo sonreí disimuladamente.

—Que te calles —Paola rodó los ojos —. Hay algo que debo decirte —dijo, mi amiga, metiéndose inmediatamente su hamburguesa en la boca.

Esa era la peor señal, cada vez que Paola tenía algo que decir y comía inmediatamente, era para evitar que la obliguemos a hablar más de lo que ella quisiera.

—Te escucho —respondí algo temerosa, mientras Daniel nos observaba curioso y callado en su lugar.

—Rubén me invitó a salir hoy —soltó sin más.

—Ah, vaya, pues genial, ¿no? —me mantuve algo callada y expectante, ya que aún no entendía muy bien que tenía eso que ver conmigo.

—Y bueno, Rubius le pidió a Frank que nos acompañase.

—¿Qué? —solté una pequeña risa —, que incómodo ¿no?, ¿qué hará Frank con ustedes?

—Es una gran pregunta, ¿sabes? —Pao, empezó a ponerse nerviosa y yo solo esperaba que no se trate de lo que comenzaba a imaginar —, ya que la respuesta es algo graciosa... Verás... Él irá porque estará acompañándote a ti.

Joder, si era lo que estaba imaginando.

Paola volvió a meterse otro pedazo de hamburguesa en la boca, mientras Daniel aguantaba la risa y yo tenía una cara de impacto total.

—Te volviste loca, ¿cierto? —respondí con la poca calma que me quedaba.

—Venga, ____ —insistió —, no volveré a pedirte otro favor en la vida —ambas sabíamos que eso no era cierto —. Es muy importante para mí. Quiero salir con Rubén, pero sus fans no son nada tontos, sospecharán si siguen viéndonos solo a los dos y ya sabes que Rubius ya tuvo una mala experiencia así con una ex-novia, así que eres mi única esperanza.

—No puedes estar haciéndome esto —bufé —, ¿Qué pensará Frank?, seguro piensa que es idea mía y estará presumiendo toda la noche.

—Claro que no, Rubén se lo pidió de favor, al principio se negó, ya que dijo que el día que te invitase a salir quería hacerlo por sí mismo.