Mi vida, Mi amor en mi Block! (Terminada)

Capitulo 4 1-3

Le di la mano y en eso me da un tirón quedando muy pegados, sentía su respiración, solo podía ver esos brillantes ojos. Me dio otro tirón mas, pero no para lo que piensan, sino que me dio un tierno, hermoso y dulce abrazo.

Justin se separa y veo una hermosa sonrisa que todos los días veías de lejos, esa sonrisa que anhelo para que estuviera a centímetros de mis labios.

-Oye di...disculpa, ¿por que el abrazo?- digo con la voz entrecortada y nerviosa.

-No lo se, solo cuando estoy cerca de ti siento que debería hacer tantas cosas y sin pensarlo dos veces, es raro ¿cierto?-

Me va a dar un ataque, lo besaría sin pensarlo dos veces en este momento -¡Si, que raro! pero total... muy lindo tu abrazo.

-Gra...gracias- me dijo nervioso. ¿Justin Bieber nerviso? sera mi imaginación.

-Jóvenes, les dije que no se tardaran, ¿no piensan venir a la clase?- nos grito el profesor desde el otro lado de la cancha.

-Si, ya vamos profesor- dijimos

Tomamos la botella de agua y nos dirigimos a donde estaban los demás y empezamos a realizar calentamiento, el profesor les puso a los chicos a jugar basquet, que obviamente Justin no iba a faltar. Cada ves que encestaba me volteaba a ver y me guiñaba el ojo, me derretía en ese momento, no se por que lo hacia, pero que siga así, se estaba cumpliendo uno de mis sueños ojala nunca despierte. Media hora después ya había acabado la clase, y me dirigía a los vestidores y Justin me siguió por que me quería preguntar algo pero no me había dando cuenta que cunado ya estaba en los vestidores cambiándome, quitándome la blusa y el short entra Justin.

Se me cae la ropa al piso por el susto de verlo entrar, no se que hacer, me quede ahí parada, semi desnuda. Justin se quedo parado viéndome.

Me quede estático de solo ver el cuerpaso de Ariadna, nunca creí que tuviera ese cuerpo por la ropa que ella utilizaba. ¡Por Dios! tiene mejor cuerpo que Abby- Penso Justin.

-¡Jus...Justin!- dije con nerviosismo y toda roja de la cara.

-¡Ya! ya me salgo- se voltea y se va. Solo algunas de las chicas se quedaron viendo ese incomodo momento.

Termine de vestirme y con toda la pena sales y veo que Justin esta parada al lado de la puerta.

-Mil disculpas Ari, yo solo no quería... no de verdad, no fe... no... es verdad ...yo no...-

-Tranquilo, fue un incidente- lo interrumpí tranquilizándolo.

-¿Me perdonas?-

-En serio Justin, fue solo un accidente, tu intención no era esa.

-Que pena, nunca me había pasado esto- decía todo apenado.

-Solo, solo olvidemos esto ¿Si?- le dije con una timida sonrisa.

-Esta bien- me correspondió la pequeña sonrisa.

-Y ¿para que me buscabas?-

-Ah si, quería preguntarte que si ¿estabas desocupada estar tarde?-

-Bueno creo que no, no tengo nada que hacer ¿Para?-

-Bueno, no se, tal vez como que me agras mucho y pues quería saber si tu... nosotros dos... tarde libre... helado?- me decía nervioso y con las manos en los pantalones.

-¿Es..es una cita?- le pregunte mas roja que nunca.

-Mmm si, algo así-

-Bueno, si, ¿por que no? ¿a que hora?-

-A las dos ¿esta bien?-

O por Dios, ¡tengo una cita con Justin Bieber! no lo puedo creer.

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Saliendo de la escuela me fui directo a la casa y me acompañaba Susy, que me ayudaría a buscar un atuendo para la cita de hoy.

-Susy no se que ponerme- dije casi al colapso mientras Susy revisaba ne mi armario.

-Ari no tienes nada lindo aquí. ¡Ah ya se! ¿donde esta el regalo que te di en tu cumpleaños?-

-¡No! ni de chiste me pondré esa ropa- dije con los brazos cruzados y viéndola seriamente.

-¿Quieres impresionar a Justin? entonces ponte eso, vamos te veras linda y es ajustada y a la moda-

-Me voy a ver rara-

-Claro que no, te veras linda para Justin-

Resignada fui por la caja que estaba guardada.

-Al fin, te tardas una eternidad buscándola, ¿todavía la tenias en la caja? -dijo Susy viéndome enojada.

-Es que no pensé que me la pondría-

-¡Pues te la pondrás!-

Susy me ayuda a vestirme y arreglarme por que ya casi eran las dos y ya vendría Justin. Escuche un carro y que después alguien tocaba la puerta. El corazón se me quería salir. Susy se iría un poco después que yo, fui directo a la puerta y la abrí.

-¡Dios mio!- dijo Justin inspeccionándome de pies a cabeza.