Aguantando las miradas como si de una guerra se tratase verde contra azul, casi sin pestañear, con el rictus sin movimientos, ni un ligero temblor ni una mueca ni nada, cualquiera apostaría a que se hubiese parado el tiempo.
-¡South, McCorn! Se supone que tienen que diseccionar un corazón, no están en un duelo del oeste sino en clase de biología.-nos regañó Liford.
-Otro serio en el que justo cuando lo voy a ganar aparece alguien que te salva, señorita South - cometa Liam irónicamente.
-Venga ya, sabes de sobra que lo iba a ganar yo. Me toca diseccionarlo a mí.
- Alex, Alex, Alex, sabes que eso es mentira, ¿ verdad Ronnie?- le dice a un chico pelirrojo que s sienta delante nuestro, quién se gira y asiente.
- Ves, me toca.
- Liiiiaaam- le llamó y hago mi puchero estilo perrito- Yo estudiar cirugía, tengo que hacerlo sí o sí.
- Si claro, y yo tengo un talento oculto de carnicero que no descubriré a menos que realicé la disección. No hagas pucheritos te creía más maduro que eso.
- Y yo creía que los chicos no teníais la regla. Bipolar.
-¿ Se supone que me tiene que hacer gracia?- me pregunta secamente enarcando una ceja.
- Sabes, déjalo cuando se te pase el mal humor y vuelvas a ser una persona normal hablamos.
-Si, mamaíta.
Su actitud se vuelve distante y fría durante el resto de la clase apenas me dirige la mirada esta demasiado concentrado en diseccionar el dichoso corazón.
Cuando por fin termina la clase y salimos del laboratorio Liam pasa de mí sin despedirse si quiera, a mi derecha oigo unas risitas, me giro para ver al trío de chicas que se ríen de mí, mientras una me señala, las otras dos están tan rojas de tantas carcajadas que parecen que se van ahogar, ojalá.
Pienso si plantarles caras o pasar de ellas me decanto por la segunda opción al fin y al cabo Paula, la chica que me señalaba, ya tiene bastante con su horrible nariz de rudolph, gracias karma no sabes lo importante que eres para mí.
-De verdad que eres increíble- su tono irónico y ronco de vez no dejan duda alguna de quien se trata.
-Se te olvidado la parte de única e inigualable- le respondo de forma insolente y con gran seguridad. Observo como frunce el ceño sorprendido por mi respuesta a la vez que sus labios se curvan en algo parecido a una sonrisa.
-Sigues siendo una niñata Alex. No agaches la cabeza y mires para otro lado, porque ellas se siguen riendo de ti.
- Siii, es algo que me afecta un montón, incluso me quita el sueño... No sé como seguir aguantando- comento irónicamente.
- Venga ya South a mí no me engañas. Es más me parece patética la gente como tú que va de víctima porque no sabe plantar cara a la gente que le increpa, pero sabes una cosa a parte de ti hay más gente que sufre las consecuencias de lo que te ...
Mi cerebro desconecta a mitad de su discurso, palabras vacías no es más que eso, exageraciones absolutas, lecciones que damos a los demás, porque somos nosotros quien necesitamos oírlas.
Puede que Marcus y yo ya no seamos nada cercanos, que haya cambiado absolutamente, pero por más cambios que haga una persona en su vida por más que varíen sus pensamientos la esencia que le compone sigue siendo la misma. Re cuerdo que hace un par de años cada vez que él tenía un problema se enfadaba con el mundo, sus míticas charlas sobre cualquier tema a la primera persona que se le pusiera por delante o que le recordara su problema, los consejos que le daba eran precisamente los que él necesitaba oír, y ponía un tono de voz monótono el mismo que esta usando ahora.
Supongo que hay cosas que no cambian, y no puedo más que alegrarme por eso.
Continúo caminando por los pasillos hasta la siguiente clase buscando entre la gente alguna cara conocida, al fondo a la derecha veo a Helena hablando con John, aunque este apenas la había dejado de presentar atención al notar mi presencia , un bufido de desesperación sale de mi pecho, John me seguía viendo como más que una amiga pese a que ya le aclara más de una vez la situación, es muy simpático... pero hay algo en él que no... Y para rematar la situación Helena esta coladita por el desde primero.
No si cuando digo que me siento la protagonista de una telenovela.
Pov Liam:
Siento como me late la cabeza, las punzadas son tremendas y el dolor no se va, igual que mis pesadillas. Siguen ahí, por muchos años que pasen de ese día, soy capaz de revivir cada momento, cada segundo, puedo volver a oír cada grito cada gemido de dolor, y me sigue estremeciendo de la misma manera que la primera vez. Todo sigue igual o peor, siempre he odiado a la gente que dice que estoy bien cuando en su interior se está librando la tercera Guerra Mundial, y yo soy uno de ello, me odio a mí mismo.
Me odio por no ser valiente, por no poder expresar mis sentimientos, por poner muros que evitan que las personas me conozcan tal como soy, por tener controlado cada uno de mis gestos, por ser incapaz de ver mi reflejo,por haber dejado de ser espontáneo, de sonreír simplemente por ser feliz, incluso me odio por haber gritado a Alex.
Alex...
Tan cabezota y a la vez tan tímida, es un libro abierto hecho persona, resulta tan fácil leer sus expresiones a cada momento, transparente y auténtica, y adoro que sea así. Simplemente la adoro.
s
HOLA a todos espero que hayan disfrutando del capítulo, mi parte favorita es lo escrito desde el punto de vista de Liam.
Liam es multimedia.
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Cuando eras mi mejor amigo
Teen Fiction- Te he dicho que te alejes de una vez, acaso no lo entiendes, niñata. - ¿Marcus que estas diciendo? - Que te largues, no quiero verte. VETE!! - No estas hablando enserio, somos mejores amigos, uña y carne, hermanos, dime que esto es una broma. - Ni...