Capítulo 13 [ST]
-¿Y por qué iba a querer hacerte daño si no sois nada?.
-La dejé por volver a estar con vosotros y esa chica aveces me daba miedo, era muy controladora y pensaba que yo era un muñeco con el que podía hacer cualquier cosa.
-¿Y qué tienen que ver tus hijos en todo esto? Ellos siempre han estado contigo.
-No le gustan los niños, además que decía 'prefieres a tus hijos antes que a mí, odio a los niños, siempre están por delante de todo'.
-¿Y dices esto ahora?.- Musita Lucía con un cierto tono de enfado.
-No pensaba que podría llegar a este punto.
-¡Es una maldita loca!.- Dice Paula.- ¿Cómo se le ocurre hacerle esto a un niño de diez años?.
-No lo sé.- Óscar aparece y se sienta al lado de Lucía.
Horas después aparece un médico con una carpeta en la mano.
-El niño tendrá que quedarse unos días ingresados para ver si mejora, está estable, tiene una costilla fracturada al igual que el brazo. Si en unos días empeora, no podremos hacer nada.
-¿De momento está bien?.
-Si, pero hemos tenido que ponerle los tubos para que respire mejor.
-¿Podemos verlo?.
-Claro, habitación trescientos sesenta y siete.
Lucía abraza a Óscar. Verlos así me recuerda a cuando Paula y yo comenzamos a salir.
Subimos a la habitación, al entrar solo hay una cama en la que yace Blas dormido. Se ve tan indefenso en estos momentos que parece que al tocarlo se va a romper. Paula se acerca lentamente y coge su mano.
-Mi niño.- Musita antes de besarle la cabeza.
(Narra Lucía)
-He pensado irme a Londres.- Expulso el humo mientras observo como la gente anda por Madrid.
-¿Para qué?.- Lo miro.
-Para trabajar.- Vuelvo a darle una calada al cigarro.- Mi primo me ha pillado un curro allí, tendré para sobrevivir durante un tiempo.
-Que te diviertas.- Tiro el cigarro al suelo y lo piso mientras expulso el humo.- Que te vaya bien.
Me levanto del suelo y sacudo mis pantalones. Vuelvo a entrar en el hospital. Mientras ando por los pasillos escucho a todo volumen música. Little do you know inunda mis oídos distrayéndome de el mundo. Aveces necesitamos estar solos, o simplemente escuchar música y olvidarte de todo.
Choco contra un chico haciendo que se caiga su café encima de los dos. Quito mis cascos y paro la música.
-L-lo siento.- Musito.
-No, lo siento yo, no estaba mirando por dónde iba.
-Iba distraída no te había visto.
-Soy Adam.- Extiende su mano y la estrecho.
-Lucía.- Sonríe de lado.
-Y dime, ¿qué haces aquí?.
-Esta mi hermano ingresado.- Mis ojos se vuelven cristalinos.- ¿Y tú?.
-Mi madre se está muriendo.
-Lo siento.- Musito.- Sí necesitas que alguien te escuche.....
-Eres una persona increíble.- Anda alrededor de mí mientras me mira.- Quieres ayudar a la gente pero no cuentas ningún problema para que la gente no cargue con los tuyos también. Posiblemente sufras mucho en silencio, y también hay cosas que solo tú sabes, ni si quiera la persona más especial para ti.
