Capítulo 11
Narra Alex
Llegué a la cafetería y David ya estaba ahí. Caminé y tomé asiento frente a él.
—¿Por qué la urgencia? —dije despreocupado.
David se acercó un poco. —No sabes a quien miré hoy.
Giré los ojos. No era sorpresa. —¿Elly?
David rió. Y luego cruzó los brazos. —¿En verdad? —Levantó las cejas.
Yo solo miré la mesa. —Déjate de juegos.
—¡Adele! —Dijo emocionado.
—¿Y? —Levanté los hombros. Mostrando poca importancia.
—¿Recuerdas que te dije que la miré en el hospital?
—aja... —Comenzaba a ser molesto.
—Está embarazada.Sentí la cara y mis extremidades heladas. ¿Embarazada? Mi expresión facial fue bastante notoria.
—¿Estás seguro? ¿Embarazada? —Mi corazón latía a mil por hora.
—Sí, hermano. Todo apunta a que sí.
Me puse ansioso. —Cuéntame.
—Estábamos mi esposa y yo... íbamos saliendo del médico. Entonces la miramos sentada. Leyendo un folleto sobre maternidad.
Era de esperarse, solo eran sospechas. —¡Ah! Pensé que era algo más...
—Déjame terminar. Después la llamaron al ginecólogo... y ella me había dicho que era una gripe. Y si no lo está, pues está planeando tener un hijo...
Me quedé pensando... Adele no podía estar embarazada.
David sacó algo de su maletín. —Mira... tomé uno de los folletos que leía.
Miré el folleto y hablaba sobre cuidados neonatales.Narrador normal
Alex se puso rojo y salió del lugar furioso. Subió a su auto y llamó a Carlos.
—¿Si?
—¿Estas siguiéndola? —Alex preguntó. Quería asegurarse de que lo que decía David era verdad.
—Así es...
—¿Y qué noticias me tienes?
—Todo normal...
Alex apretó los dientes. —Sé más específico.
—Muy temprano salió de casa de su madre... fue al hospital. Y ahora está en el edificio, de ese que usted me dio la dirección. Al parecer la Srita. Adele trabaja ahí. Le pregunté a una chica y me dijo que es nueva.
Alex tocó su barbilla. —Síguela, a todos lados. Y... —Hizo una pausa. —Cuando vaya al hospital, quiero que entres. Averigua todo lo que puedas...
—Esta bien Sr...Adele siguió sus actividades con normalidad. Fue a su oficina y empezó a trabajar. En eso llegó Alicia.
—Hola Srita. Adkins. —dijo con una sonrisa.
Adele levantó la mirada y sonrió. —Oh no no... solo dime Adele. Me siento anciana cuando pronuncias lo otro. —Ambas rieron.
—Muy bien. —Miro al suelo. Parecía que quería decir algo, pero no se atrevía.
Adele estaba concentrada en su computador. Y noto que Alicia no se iba. —¿Sucede algo?
Alicia dudó en contestar, pero al final se animó. —Es que yo quería saber si está bien. Me quede muy preocupada ayer.
Ese era un lindo gesto viniendo de alguien que prácticamente acababa de conocer. —Todo bien. Fui al médico y esperare resultados. Al parecer todo está bien.
—¡Eso es genial! —Dijo casi gritando.
En eso voltearon de las oficinas vecinas callándonos.
—Bueno... me retiro Srita. Adk... —Recordó lo mencionado. —Adele. —Entonces caminó hacía el elevador.
—¡Alicia! —'Gracias' movió los labios.Adele siguió trabajando. Esperaba con ansias su hora de salida para ir por los resultados.
Casa de Laura
—¿Crees que le gusten los regalos? —Preguntó Laura a Danny.
El volteó y levantó el pulgar. —Se va a volver loca.
—Eso espero. —Dijo Laura.
—¿Llamaste a todos?
El asintió. —Invité a medio mundo Lau. —Dijo riendo.
Ella arrugó las cejas. —Espero no sean tus amigos del póker...
—Tú dijiste que invitara a personas, eso hice. —Dijo levantando los hombros.
—Está bien, está bien... —Dijo poniendo los regalos en bolsitas. —Espero le guste...• Recuerdo •
Era el cumpleaños número 16 de Adele. Laura la acababa de conocer, pero hicieron 'click' muy rápido. Esa noche celebrarían su cumpleaños y habían reservado un bar.