Capítulo 5
Narrador normal
Alex condujo lo más rápido posible para llegar a casa. Se pasó algunos semáforos en rojo, sin importarle las consecuencias. Estaba muy enojado con Adele. Apretaba sus puños al volante, ya quería escuchar las excusas de Adele. No le importaba lo que fuera a suceder con Adele ese día, se sentía traicionado. El solo hecho de pensar que otro hombre tocaba a su mujer por las noches, hacía que su sangre se calentara más de lo que ya estaba.
Cuando llegó a casa azotó la puerta y Adele salió de la cocina desconcertada por el ruido.
—Hola cariño, ¿Qué fue ese ruido? —Ella muy natural se acercó a él para ayudarle con su saco, como de costumbre.
El sólo apretó los puños y la fulmino con la mirada. —No me toques. —Dijo Alex empujándola.
Adele lo miró sin entender lo que sucedía. Solo se hizo a un lado para abrirle paso a Alex, que camino furioso a su estudio.Ella lo siguió.
—Puedes explicarme esto... —Alex tiro las fotografías en el escritorio.
Adele perpleja miró las fotos de la boda de Laura. —Son de la boda de...
—Sí, Adele... no soy ciego. ¡No soy un maldito estúpido!
Adele retrocedió un paso, tenía miedo del comportamiento de Alex.
—¿Sabes que es lo curioso? —Alex camino hacia ella.
Adele negó, las lágrimas se apoderaban de sus pupilas.
—Que apareces en las fotos... ¡Mira! —Alex lanzo las fotografías hacía Adele. Estas cayeron por todos lados. —¿Piensas que soy idiota?
—Alex yo iba a decírtelo... —Solo eso pudo articular.
—¿Cómo te voy a creer? —Se acercó a ella y la tomó de los brazos. —Y todos piensan que soy el malo de la historia... —Soltó a Adele. Caminó de un lado a otro con la mano sobre la cadera, desprendiendo furia. Su respiración era superficial, su mandíbula apretada y sus narinas se abrían y cerraban.
Adele empezó a llorar. No pudo resistir, las palabras de Alex le dolían, más de lo que hubiera podido imaginar, el infierno de nuevo estaba presente. Se quedó parada, con la cabeza hacia abajo. Escuchando los insultos de Alex.
—¡Míralas! —Gritó.
Adele se hinco en el suelo y empezó a juntar todas las fotografías.
—Oh... hay una en especial, es mi favorita.
Adele volteo a verlo ¿Había más?Alex sacó la fotografía en la que Adele salía con aquel chico que la invitó a bailar. Adele trago saliva. No tenía nada que perder, fue solo un simple chico, siquiera sabía su nombre.
Tomó valor y habló. —Alex, se lo que estás pensando ahora mismo...
—¿ah sí? Deja te ilumino la mente. Mi esposa me mintió, fue a una boda sin mi ah y de paso llevó a su amante.
—¡No! las cosas no fueron así, Alex déjame explicarte.
El siguió hablando, ignorándola. —Dime... ¿después de revolcarte con él lo hiciste conmigo?
Ella no soportó más y le pego una cachetada a Alex.Narra Adele
Salí corriendo a mi habitación y me encerré. Que idiota fui al pensar que alguien como Alex podía cambiar en tan solo unos cuantos días. Me dolían sus palabras y me dolía que pensara todo eso de mí. Si me conociera lo suficiente sabría lo mucho que lo amo y que nunca le sería infiel... Sentí la cara caliente, un vacío enorme en mi pecho...
—Abre la maldita puerta Adele, no me hagas tirarla. —Gritó desde el otro lado de la puerta.
El miedo se apodero de mí, Alex era capaz de todo, e incluso de ponerme una mano encima.
—¡Lárgate! —dije entre sollozos.
La chapa empezó a moverse bruscamente. Me senté en el suelo, mirando hacía la puerta. Flexione mis piernas y las lleve hasta mi pecho. Me hice lo más pequeña que pude.• • •
Cuando ya no escuché más ruido, decidí abrir la puerta. Me cerciore de que Alex no estuviera en casa. Las fotografías estaban aún tiradas por toda la casa. El solo recordarlo me daba escalofríos. Limpie todo el desastre que hicimos, deje la casa impecable. Busque mi celular pero no estaba, seguro Alex se lo había llevado para revisarlo.
Me senté en el sofá y tomé la fotografía de nuestra boda... la mire por unos segundos y la abrace. Después las lágrimas vinieron a mí. Me quedé dormida, abrazando la foto del recuerdo.