Capítulo 12

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—No sé si creerte... confié en ti y me fallaste.

El me mira triste y agacha la cabeza y yo con delicadeza cojo su mentón y voy haciendo que levante poco a poco para que me mire.

— Pero... como lo hiciste para protegerme— hago una pausa y miro en sus ojos un poco de esperanza y continuó- te daré otra oportunidad.

Ian se levanta de la cama de un solo brinco y veo como su hermosa sonrisa aparece.

—¡Amor! gracias, te amo, te amooooo— dice.

Me coge de la cintura y me apega a él y me besa tardo un poco en responderle, porque me cogió de sorpresa... Me separo y lo miro seria.

—¿Qué pasa amor?, ¿Por qué estas así?.

— Es que tengo miedo— bajo la cabeza y el lentamente hace que lo mire a los ojos.

— No estés así hermosa ya no te dejare, te protegeré contra quien sea.

— Prométeme... que siempre estarás conmigo— le digo mirándolo a los ojos y me sonríe.

— Te lo prometo, con el corazón.

Ha pasado ya un año en el que Ian y yo estamos juntos, estoy muy feliz con el... en este año que llevamos ha sido el mejor de toda mi vida, han habido peleas pero es algo normal son esas típicas peleas de yo te amo más o celos bobos.

— Amor ¿qué estás pensando? Es que estás distraída y no me pones cuidado— dice Ian con los dados en la mano.

Ian y yo no podíamos salir porque nos dio grupa y estaba lloviendo afuera, estábamos tan aburridos que decidimos jugar parques... ¿saben que es parques? ¿no? ¿no saben? pero en qué planeta viven. Que no saben que es PARQUES.

Bueno... Les explicaré, parques es un juego de mesa donde hay cuatro colores todos escogen el color que quieren y cogen sus fichas que son seis, después se turnan para tirar los dados y el que saque par puede sacar sus fichas de la cárcel y jugar... Hay partes donde pueden descansar sin ser metidos a la cárcel y hay otras que no.

Ian y yo ya hemos jugado cinco veces y ya estoy aburrida.

— Ya no quiero jugar, estoy aburrida— digo levantándome de mi puesto y escucho como Ian también lo hace.

— Entonces... ¿vemos una película? — me pregunta y asiento.

La verdad prefiero ver una película que seguir jugando a esa miercolada que solo es buena jugarla cuando se aposta plata.

— Mmm ¿cuál quieres ver? — dice mostrándome todas las películas.

— Sorpréndeme.

Él me sonrió y yo también le Sonreí.

— Mientras que Pones la película yo iré por dulces.

Fui a la cocina y prepare palomitas, busque en la nevera y saqué todo en chocolate que había (amo el chocolate, soy una chocoadicta) serví dos vasos de refresco y fui a la sala.

— Listo— Ian mira mis manos y niega con la cabeza.

—Tú— me señala — no comerás chocolate.

— Si, lo comeré— digo segura y me mira serio.

— Acuérdate lo que pasó la última vez que lo hiciste.

FLASHBACK

—Suelta eso— dice Ian tratando de quitarme los chocolates que quedaban en mi mano.

—NO, ATRÁS VOLDEMORT. SON MIS CHOCOLATES— grito corriendo por toda la casa.

—Cuidado te caes— me regaña Ian porque subiendo las escaleras casi me caigo.

Sigo corriendo hasta que entró en el cuarto de él y veo a Louis mi amigo palma, Louis estaba bailando muy sexy.

—VAMOS LOUIS, HASTA ABAJO— gritaba y me reía como loca.

—¿A quién le dices que hasta abajo? — pregunta Ian.

Frunzo el ceño, señalo a Louis y luego miró a Ian.

—Pues a Louis la palma que baila— digo obvia y Ian rueda los ojos.

—Hay solo está mi perchero— dice y lo miro mal.

—¿CÓMO TE ATREVES A TRATAR MAL A LOUIS? — pregunto enojada y veo que él se agarra el cabello frustrado.

—Louis es solo una palma— se detiene y yo hago pucheros el me mira y continua- Además no está aquí, está en la playa.

Cuando el termina de decir eso, caí en los hermosos brazos de él y me dormí.

FIN DE FLASHBACK

—¿Ya te acordaste? — pregunta con una risita burlona.

—¿Cómo sabes y que me acorde? — pregunto.

—Por las muecas que hacías cuando te hablaba y no me respondías— dice.

—Veamos la película.

MEDIA HORA DESPUÉS

—MIERDA! NO ES ÉL EL QUE ESTÁ ENFERMO, ES LA NIÑA— le grito al televisor.

—Ya Madi ellos no te van a escuchar.

—Shhh— le tiro palomitas y él se queja.

OTRA MEDIA HORA DESPUÉS.

—Se los dije, no era él... Era ella— digo furiosa y a la vez llorando.

Me levanto rápido y me voy a cambiar para salir.

—¿A dónde vas? — pregunta Ian.

—Me dio mal genio, iré a cambiarme y vamos al súper a comprar comida.

Narrando Ian

Madi se fue a cambiar para ir al súper, pienso hacerle una sorpresa... Sé que no es algo tan romántico, pero pienso darle un oso enorme.

Escucho que mi celular suena y sé que debe ser Andy.

Hola Bro.

Hola, ya está todo listo.

Gracias Bro, después te devolveré el favor.

Vale.

Cuelgo y veo que Madi baja.

—¿Con quién hablabas? — pregunta cogiendo su cabello en una coleta.

—Amm... Con Andy.

Me mira por unos segundos y asiente.

—¿Vamos? — pregunto.

—Si, vamos.

Salimos de la casa, le abro la puerta del copiloto ella sube y después voy a la del conductor y me subo. Pongo la radio y está sonando Borro Cassette de Maluma.

Esa canción me gusta.

—Ayer me besaste y no podías parar— canté y escuché que Madi estaba cantando también.

—Y me bailaste hasta el amanecer, cuando desperté yo te quise llamar y ahora me dices que borrar cassette... — cantó Madi.

—Que no se acuerda de esa noche, ella borró cassette. Dice que no me conoce y yo quiero volverla a ver.

Ella me miró y negó divertida.

—Y que los tragos hicieron estragos en su cabeza que ella con cualquiera no se besa, quiero que seña que me interesa y no hay un día que no pare de pensar en su belleza— cantamos los dos y llegamos.

Antes de amarnosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora