Escribo para no olvidar,
ese sueño con el que me desperté pensando que era real.
Me tuviste entre tus brazos, mientras la luna estaba de espectadora, me decías amor, reías conmigo, estábamos agradecidos de una descomunal felicidad
y yo sí estaba consiente de lo que te decía."¡Te amo!" te dije.
"¡Te amo!" te volvía a repetir.
y seguía en tus inigualables brazos.Dimos vueltas al ritmo de nuestros suspiros y los latidos fuera de si. Desperté y volví a la realidad, una triste y distorsionada.
Queriendo regresar a esa utopía, cerrando fuertemente los ojos e intentar soñar que te tengo de nuevo, mis débiles piernas abrazando tu cintura y diciéndote al oído:
"te quiero aquí siempre."