La ultima campanada del día sono, y todos los salones, jardines y demas áreas con las que contaba el instituto comenzaron a vaciarse; saliendo a la fria nevada que aguardaba afuera en las calles.
Esa tarde tampoco me quedé a platicar luego de clases, pues todas tenían cosas que hacer antes de la hora acordada para vernos.
Camine sin ningúna prisa rumbo a casa. Mi visión acerca del fin de semana no era "extraordinaria", de hecho sólo consistía en acomodarme en la cama y descansar de la exhaustiva semana que pase.
Recordé el día tan difícil que había tenido. Nunca imaginé que ignorar a alguien fuese tan difícil; me era imposible ignorar cualquier movimiento que ella hiciera.
La forma en la que escribía. En la que miraba el pizarrón. Y las raras veces en las que se perdía en sus pensamientos. Era única.
Tenía la manía de morder el lápiz en las clases de matemáticas. Se sentaba en la parte delantera en clases de química. En nuestros tiempos libres y almuerzos, siempre iba a la biblioteca; lo cual me parecia raro, nunca había visto a alguien frecuentar a ese lugar tantas veces solo por gusto, ella era especial.Como cada tarde al llegar la casa estaba vacía, asi que sin hacer más subi a mi habitación. Tire la mochila en un rincón, abri las persianas de mi habitación, tome mi laptop del escritorio y me tire en la cama, podría decirse que eran mis tardes antes de su llegada.
No tarde buscando algo interesante que hacer, pues termine viendo la primera película que apareció en la lista de estrenos.Tenía planes esa tarde para verme con un viejo amigo en casa. Veríamos películas, beberiamos cafe y platicariamos. Habia pasado cierto tiempo desde la última vez que nos vimos, asi que le pedi a mis padres permiso para invitarlo en la tarde.
Eran las tres y media de la tarde cuando la tranquilidad de la casa al igual que mi película, fueron interrumpidas con el sonar del timbre.
Dejé el aparato electrónico sobre la cama y me levanté de esa. Caminé hacía la salida y cruce el pasillo hasta las escaleras, en donde me deslize hasta el primer piso.
Cuando estaba más cerca de la puerta principal volvió a escucharse el sónar del timbre.— ¡Escuche la primera vez! — me queje llegando a la puerta, girando en ese momento la perilla
Ojos grises, sweter azul, jeans oscuros, bonites cafes y una sonrisa en el rostro fue lo que observe en cuanto abrí. Típico de Peter.
— Pensé que beberiamos café, no que iríamos a una pasarela hipster — me burle haciendolo rodear los ojos
— Ja-Ja — regreso la sonrisa — Con tu vestimenta te confundirian fácilmente con un vagabundo, mi querida amiga
Reí por eso y me lancé a abrazarlo.
— ¿Como has estado? — pregunte al finalizar nuestro contacto físico, invitandolo a entrar a la casa.
— Pues...bien
— No funcionará usar el "pues" — resaltó cerrando la puerta - Dime lo que sucede
— No sucede nada — acepte con una risa desinteresada - ¿Como has estado tu?
— Mmm...bien — cerró la puerta de la casa para no dejar que el frio entrará — Con muchas tareas en la escuela y problemas en casa — se limitó a contar
— ¿Tus padres de nuevo? — pregunte dejanome caer en el sofa
— Por momentos deseo tanto que se divorcien de una buena vez y asi terminar con este dolor de cabeza
— Pensé que no querías que se divorciaran
— No quiero — negó dejándome con confucion — ¡Bueno si, pero, no! — volví a verlo, aún más confundída y con una sonrisa en el rostro — No quiero que se separen por mis hermanas
Mi sonrisa se borró de inmediato al recordar a sus hermanas menores. Ellas apenas eran unas niñas, y la razón más grande por la que Peter no quería el divorcio de sus padres eran ellas, era difícil.
— Wow...es un asco — admiti, aunque en realidad no sabía que decir — ¿Quieres tomar algo? — intente evadir el tema
— Quizás un cafe — me levante por eso — Pero, ¡espera!, uno de starbucks — rodee ambos ojos
— No saldré en medio de una nevada por un cafe frio al otro lado de la cuidad — dije yendo hacia la cocina
— ¡Traje la Jeep de papá! — comentó en un susurró bastante alto, gire a verlo de inmediato
No era interesada por las cosas materiales, al menos no todo el tiempo, pues no me gustaba ser asi. Pero debía admitir que aquella Jeep en serio me encantaba y más cuando Peter me dejaba conducir.
— ¿Podré llevarla? — pregunte curiosa regresando a donde el estaba, dando pequeños golpes con los dedos en la pared
El asintió, sacando las llaves de su bolsillo y sosteniendolas en alto para que pudiese verlas bien.
— Bien, iré a vestirme, no tardo — avisé yendo a las escaleras apresurada — ¡No tardo!
Quizás en esos días no tenía sospechas, pero con el tiempo surgio la ligera sospecha de que las cosas parecían estar planeadas por el destino, ¿Sería mucha casualidad que la encontrara en la mayoría de las partes a las que iba?
ESTÁS LEYENDO
Our Memories
Fiksi Penggemar"Esta es la historia de dos personas que no deberían haberse conocido y que quizás se dañaron mucho entre si, pero que descubrieron que eran las únicas dos personas en el mundo que podrían comprenderse" Derechos reservados, cualquier copia o adaptac...