Las frikies se enamoran

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A la mañana siguiente amanezco con jaqueca. Eso siempre me pasa cuando lloro mucho. Tengo mucha rabia conmigo misma por permitirme llorar tanto que estoy en este estado.

Tomo mi celular, lo enciendo y veo que tengo como 10 llamadas perdidas de Gabriel más como 20 mensajes. Los borro sin leerlos, no quiero sucumbir a sus tontas excusas.

Luego tengo como 30 mensajes de mis amigos en el grupo de whatsaap dándome su apoyo, maldiciendo a Gabriel y otros de Pam especificando como debería cortarle la pipí en trocitos.

Para mi asombro no hay ningún mensaje de Gabriel en el grupo a pesar de estar incluido. No lo hemos sacado y él no se ha salido, ha aguantado todos la insultos o los ha ignorado.

Me levanto de la cama, y alisto mi ropa. Al principio no quiero pensar mucho en como vestirme pero luego recuerdo que voy a la guerra y como dice mi mamá: a la guerra con las mejores armas.

Así que al contrario de lo que suelo llevar al colegio alisto una falda corta pero no tanto, mis botas altas abiertas estilo militar, una blusa con el símbolo de Batman ceñida al cuerpo y para rematar el cabello más cepillado que nunca. Aunque con lo lacio que es es imposible crearle cuerpo.

Le envío un mensaje a las chicas, diciéndoles que voy preparada para la guerra y que solicitó su apoyo. Ellas saben que eso significa ir deslumbrantes.

Hailly contesta con un 😉 y Pam con un 😒👍🏻

Sonrío, Hailly siempre tan dulce y Pam, bueno, es Pam pero es incondicional.

Me doy una ultima mirada en el espejo, tomo mi bolso y bajo las escaleras. Debo enfrentar el interrogatorio de mamá.

Cuando bajo, ya todos están sentados en el desayunador. Mi mamá alza la vista sonriendo pero luego su rostro se muestra preocupado. Ya sé que sabe que algo me pasa. Es una bendita adivina. Carraspea y toca el hombro de mi papá que está desayunando mientras ve el periódico para que me mire. Yo trato de ignorarlos mientras tomo asiento a la par de Carol que me mira de arriba a abajo por mi vestimenta.

Me sirvo el cereal mientras observo disimuladamente el cruce de miradas de mis padres. Hasta que mamá decide empezar con su interrogatorio disimulado:

- ya viene Gabriel por ti? - pregunta

Yo suspiro, dejo la cuchara en el plato y los miro. Debo enfrentarlos. Cuanto antes sepan la verdad mejor.

- No - le digo - de hecho Gabriel no va a volver a esta casa por un tiempo o indefinidamente....

Ambos me miran estupefactos y Carol también lo hace. Cuando veo que mi papá va a hablar levanto una mano para que se detenga.

- igual lo van a saber...lo que pasa es que Gabriel me puso los cachos, seguro que no quepo por las puertas de los grandes que son...- hago el amago de una sonrisa irónica.
- los cachos?? - pregunta mi papá confuso

Carol vuelve los ojos en blanco y me mira compasiva.

- quiere decir que le dio vuelta, que la engañó.. Que se fue con otra, que...
- basta Carol - la interrumpe mi mamá - ya entendimos

Mi mamá se acerca a mí y me abraza mientras a mí se me hace un nudo en la garganta.

- voy a estar bien - le aseguro
- yo lo mato - dice mi papá - tanta insistencia para estar juntos, tanto que hiciste y él...él te traiciona...
- papá -lo detengo poniéndole una mano en su brazo - no te preocupes. Él no sabe lo que perdió...pero créeme que cuando lo descubra va a ser demasiado tarde - le aseguro - me aseguraré de ello

Mi mamá sonríe orgullosa por mis palabras y mi padre se inclina para darme un beso en la mejilla.

- esa es mi guerrera - dice sonriendo