Último día de clases y empezaban las vacaciones de invierno.
Hoy teníamos clase de lengua a la segunda y tercer hora, me senté sola un rato, vi a Andy pasar por mi banco y lo llamé para hablar.
Yo: Andy quiero decirte algo.
Andy: ¿Qué pasa Ali?
Yo: Sientate aquí, las chicas todavía no van a venir-se sienta a mi lado y en su cara se veía que estaba confundio-Voy a hacer esto rápido, me gustas, pero sé que esto no es correspondido. Entonces quiero olvidarme de ti lo más rápido posible.
Andy: Yo también.
Yo: ¿Vos también qué?
Andy: Que me gustas tonta
Me di cuenta que el tono de mi cara era igual al de un tomate, ya que la sentía caliente.
Yo: ¿Y desde cuando piensas eso?
Andy: Desde que te dije que eras rara, no eras lo sigues siendo-dice seguido de una pequeña risita.
Esto es muy extraño, nunca me pasan cosas tan buenas a mi y esto es demasiado bueno para ser verdad.
Llegó la profe y Andy se fue a su lugar, Mal se sentó conmigo y pasaron las horas hasta que nos fuimos.
