Capítulo 10.

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Guarda me un secreto:

Este es un día que muy pocos recordaban, pero que merodeaba en la cabeza de Katrina, era fácil saberlo porque quién leyera su diario notaba que en varias ocasiones estaba escrito.

Spencer y Joe lo habían dejado en el olvido, sin embargo Katrina miraba algo extraño lo que Elena había echo por ella.

Ambas eran enemigas, ambas se relativamente "odiaban", un día, cuando Caroline quiso hundir a Katrina, Elena apareció salvándola. Jamás llegaron a tocar este tema porque se les hacia incómodo, ni siquiera Elena sabía que era lo que la había echo actuar de esa forma.

—Hola señora Dacota, ¿está Elena? —preguntó la pelinegra.

—Katrina, es raro tenerte aquí, ¿A pasado algo con Elena? ¿Te a lastimado? —habló su madre algo enojada.

Todos estaban al tanto de la enemistad de ambas chicas, por éso la reacción de Dacota al ver a Katrina en su casa preguntando por Elena.

—En lo absoluto —se apresura a decir la chica—. Tampoco crea que somos las mejores amigas del mundo—específico cuando vio una clase de esperanza en los ojos de Dacota—... Sin embargo, he venido en paz, solo quiero conversar con ella un rato, últimamente nos hemos estado entendiendo.

—Me alegra mucho eso, pasa, ya sabes donde queda su habitación, ve—le dijo.

No era primera vez que Katrina iba a casa de Elena, en un pasado, Katrina había tomado de hobbie hacerles maldades a su enemiga, ninguna terminaba bien pero de eso se trataba.

— ¿Salvatori? ¿Qué haces aquí? —preguntó Elena confundida.

— ¿Me guardarías un secreto? —le preguntó ella aún parada en el puerta.

Elena, algo confundida, dudó por un segundo pero algo en ella decía que aceptara y éso hizo. Ambas el último mes se habían estado llevando bien, se conocían desde siempre y aunque se "odiaban" había confianza entre ellas.

Katrina pasó a la habitación, cerró la puerta, tomó aire.

—Antes de decírtelo, debes prometer guardar lo —habló Katrina alzando el meñique.

— ¿Qué edad tenemos? ¿cinco?—preguntó irónica, Elena.

—Sólo así confiaré, lo sabes —dijo. Elena lo prometió con el meñique.

Elena se preparaba para todo, inclusive una broma como siempre se las hacia.

Oh Elena, ni se imaginaba lo que era.

—He matado a alguien —susurró Katrina pero Elena claramente la escuchó.

— ¡No, no, no! ¡Seré juzgada como cómplice, calla!—exclamó, Katrina se le lanzó encima y le tapó la boca.

—Basta, Elena, si hubiera riesgo no te diría nada—murmuró enojada.

— ¿Y por qué no? De seguro y quieres culpar me —habló enojada empujando a Katrina.

—He venido a ti porque no sé más a donde ir, sólo consigo sentirme bien es contigo —susurró algo entristecida.

— ¿Qué hay de tu novio? —le preguntó algo dudosa.

—Puedo confiar en él pero no me gustaría darle este peso, él es un chico que actúa por medio de los sentimientos y...

Ni se tomó la molestia de explicar que Logan no era su novio, por más que ella lo negara, todos lo  veían así.

—No te conviene, yo a diferencia he sido una desgraciada contigo—la interrumpió.

—Exactamente.

—Katrina, ¿A quién has matado? ¿Por qué?—le preguntó tomando en cuenta el tema de conversación inicial.

La historia que exactamente ustedes han leído, es la misma que Katrina le contó a Elena, exactamente igual. Elena no evitó contener las lágrimas que de sus ojos salían, Katrina hablaba y ya no parecía tener algún dolor. Aunque, Elena se percató de que había algo extraño en ella.

—Se lo ha merecido, pero mi pregunta es, ¿por qué te has encargado tú de eso?

—Hay dos razones—dijo—: la primera es que era morir yo o morir él. La segunda, es que nadie habría hecho algo, sólo Joe, pero mis padres quizás ni me creyeran, el tío Mark tiene amigos policías así que no estaría tanto tiempo Dave ahí en la cárcel. Yo vi la necesidad de encargarme y lo hice.

—Pero K...

—Estoy pensando en suicidarme, Elena, en realidad lo haré.

— ¿Por qué? —estalló Elena, Katrina se puso de pie, anteriormente ambas estaban en el suelo. Elena la vio sospechosa y entonces Katrina alzó su blusa. Pero no había nada que ver más que marcas echas por ella misma.

—Tengo tres semanas de embarazo, el mes que viene me voy a Australia con Logan por un año.

— ¿Estás... Em... Embarazada?

—Así es, y de Dave—acarició su estómago y bajó su camisa—. Sé lo que haré con ese bebé.

— ¿Abortar?—preguntó con los ojos en blanco.

—No, brutalidad. Joe y Spencer se harán cargo de él cuando yo muera.

— ¿Y por qué me lo dices?

—Porque, moriré, y me siento apenada, eres una gran chica, pudimos haber sido grandes amigas —respondió abrazándola.

—No quiero que nueras, K.

—Así tiene que ser, pero, siempre te llevaré en mi corazón—susurró con sus ojos llenos de lágrimas—. Guarda me este secreto.

—Guardaré todos los que quieras.

Espero que les guste.

Con amor: Zafiro

El Suicidio De Katrina[EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora