Prefacio

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Del odio al amor, típico cliché ¿Verdad? Bueno, la vida es así. Ésta trae sucesos inesperados, pero que deben ocurrir en algún momento de nuestras vidas.

Comencé a mentir casi todos los días después de aquel problema... no, olvídalo, mentía todos los días, cada segundo... aunque todo eso cambió.

Yo cambié.

Mi mundo consistía en estar horas sumergida en mis libros, los cuales me llevaban a nuevas aventuras, romances, etc.; en mis cuadernillos, en los cuales podía escribir cómo sería mi vida ideal, dibujar lo que surgiera en mi imaginación, pero todo esto solo era un refugio en contra de la realidad. Poco a poco mis sueños también fueron tomando cierto rumbo, el cual me desconectaba de mi familia. Algo ideal en aquel entonces.

Mentiras de EnsueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora