Capítulo 4

228 14 84
                                    

~Ring Ring~ ~Ring Ring~ ~Ring Ring~

El sonido del teléfono me despertó. ¿Que hacía en mi cama? Mis últimos recuerdos eran sin duda... ¿Que había pasado? Otra vez una situación que mi mente era incapaz de manejar...Me sentía perdida...otra vez. Puede que, simplemente soñase con el atropello y que realmente, no me hubiese encontrado con ese chico misterioso y eso, simplemente, no hubiese ocurrido. Me fije en mi mano izquierda...las palabras que no debía olvidar y que tanto había atesorado en mis recuerdos, el pequeño texto que Shin había escrito en mi mano... No estaba...

Me levanté y me dirigí a la mesita para coger mi teléfono, pero, para mi sorpresa, no era Shin quien me llamaba... sino Ikki-san. ¿Debía querer preguntarme algo del trabajo?

Ikki-san: -¡Buenos días!-Sonó su voz, alegre, al otro lado del móvil.

-Buenos días...

Ikki-san: -Si no me equivoco hoy es tu día libre en el trabajo, ¿Te vendría bien ir a alguna parte juntos?

-Ah...- Rápidamente, él me interrumpió.

Ikki-san: En quince minutos estaré en tu casa.

Colgó. Estaba perdida...otra vez, ¿porque querría Ikki-san pasar un rato conmigo? Quizás no lo sabía y eramos muy amigos. Pensé en avisar a Shin de que no iba a estar en casa hoy por la mañana pero decidí no precipitarme, recordé lo que el día anterior había pensado: "no añadir información extra" lo que quería decir que debía actuar con cautela.

Cuando fui a cerrar la pantalla del teléfono me fijé....en la fecha. Día uno de agosto, por favor, no, NO, ¡NO! ¡Otra vez no por favor! ¿Donde me encontraba esta vez? Por favor, nunca olvides, pase lo que pase, lo que escribí en tu mano. Te amo, Shin. No, no lo había olvidado y no lo haría, pero, ¿servía de algo? Si alguna cosa había aprendido era que, si el día en que me encontraba era día uno de agosto, podía considerar mis recuerdos simples fantasías.

~Ring Ring~ ~Ring Ring~ ~Ring Ring~

Era Ikki-san otra vez:

-¿Si?

Ikki-san: -Estabas un poco apagada cuando te llamé hace unos minutos, ¿Te encuentras bien?

-Si, no te preocupes, estoy bien.

Ikki-san: -Me alegro de que así sea, en unos dos o tres minutos estaré delante de tu casa.

Me vestí rápidamente para que Ikki-san, no tuviese que esperarme, pero pasaron diez minutos y luego viente y llegados los treinta minutos me preocupé. Decidí llamarle pero no me contestó de modo que me dirigí hacia la calle para ir a buscarlo o, al menos, esperarle fuera. Una vez allí, vi a Ikki-san, llevaba unas gafas de sol y estaba rodeado de chicas las cuales decían cosas como:-Me habías prometido que pasaríamos un rato juntos- y cosas así. Espere unos minutos pero me sentí como si fuese una molestia así que decidí subir otra vez a mi piso.

¿Porque llevaba gafas de sol con el día nublado que hacía? ¿Porque estaba rodeado de tantas chicas? ¿Acaso era famoso y yo no lo sabía? Mientras rondaban un montón de preguntas por mi cabeza sonó el timbre de mi casa. Era él y me dijo por el telefonillo que bajase a verle.

Ikki-san: -¿Donde quieres ir? Haré cualquier cosa que tu me pidas.-Dijo de forma juguetona.-Tratare de satisfacer todos tus deseos...

Trate de pensar una respuesta rápida, ¿Pero que estaba tramando ese chico? Me pareció muy impertinente su comentario y fuera de lugar.

-Al cine, vayamos al cine.- No entendía nada pero después de días confusa vagando por..¿Donde? Había aprendido a adaptarme a cualquier situación.

Amnesia laterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora