Sus pupilas se intensificaron, yo no sabia que decir, se retiro y cerré la puerta lentamente. Me quede inmovilizada frente al gran trozo de madera blanca.
-¿De una vez les dejaba la habitación para ustedes solos, no crees?-Mía me regalo gran sonrisa, podía notarse por el reflejo del espejo . Me di la vuelta y me tumbe con ella en la cama dando un profundo suspiro, mirando hacia el techo.
-¿Puedo dormir aquí?- pregunte temerosa, estaba agotada.
-Claro que si, no es necesario que lo preguntes- finalizando, bostezo. Pude notar que necesitaba descansar, me gire hacia la derecha e intentaba conseguir dormir.
(...)
La rutina de todas las mañanas sucedió, esas pesadillas torturaban mi mente, pero ya era costumbre que alguien me despertara debido a mis gritos.En verdad no tengo de idea de ¿cuando esto terminara?. Desearía ya no molestar mas a los demás durante un tiempo. Las suaves palabras de Mía me habían despertado, agradecí que me dejara dormir en su habitación y fui ala mía para tomar una ducha e iniciar otro día de estudio. Aun con el frió decidí comprar el frappe que tanto me gustaba del Starbucks. Al terminarlo me dirigí hacia el salón que me tocaba, mire a todos lados, pero no, no se encontraba el ahí, seguramente esta clase no estaba en su lista de horario. Transcurrían las horas, no había puesto mucha atención, su recuerdo invadía mis pensamientos, hasta que sonó el timbre de descanso y salí de ahí aturdida buscando a Mía.
-Disculpa la noche anterior, Kain tenia razón, tu y tu amiga son mejores personas que mi ex- novia Riley, agradecería tomaras un café esta noche conmigo-, pronuncio aquel chico alto de cabello castaño y silueta delgada.
- No, gracias, no es necesario- Mía bajo la mirada, y le fue entregada una flor. Aquel chico se perdió entre la multitud, no logre ver quien era.
-¿Y eso, que fue?- Pregunte con curiosidad.
-El, el es, mi compañero de habitación su nombre es Blate- Su voz sonaba temerosa.
-¡¿Aquel patán?! ¡¿El de la fiesta?!-Pregunte expresivamente. No podía creerlo, tenia un aspecto arrogante e intimidante y en cuestión de horas era el chico bueno. Ahora recuerdo que Kain menciono que no solía ser así, que aquella ocasión fue la primera vez.
-Si, ese mismo, intentaba disculparse pidiéndome tomar café esta noche- Observo su mano - y supongo que esta flor tenia el mismo propósito- Continuo. La mire acompañada de una sonrisa picara. -¡Ashley!, ¡No! ¡Ni lo pienses!- Renegó.
-Entonces,¿ por que estabas muy tímida?- Dije interrogativa.
-Pues, porque, no acostumbro hablar con chicos- Se sintió satisfecha, pero la interrumpí - y ¿Eso explica tu cara roja como tomate?- Me burle, en realidad quería que admitiera que se ruborizo ante Blate.
-Esta bien, si, es lindo- Jaque mate, lo había conseguido. Continué balbuceando sus nombres durante el transcurso del descanso. Nos sentamos en una banca de cemento, y abrimos nuestros refrigerios. Dos sombras se posaron en el suelo, subimos la mirada.
-¿Necesitan algo?-Pregunte amable, la forma en la que nos miraban esas dos chicas y sus narices de gesto repugnante hacia nosotras, me tenían nerviosa.
-¿Disculpa?, ¿No me conoces verdad?-Era tan arrogante su voz, ahí me di cuenta que ese estilo de ropa, lindas uñas, bolsos caros, cabello perfecto teñido a rojo y raíces castañas, pertenecían a toda una chica que se le da lo que desea, por el simple hecho de estar llena de billetes.
-Bueno- Suspiro - Supongo que no, ¿Cierto?. Soy Clarise y justo el día anterior, aparte este lugar ante todos para evitar tratar con personas como ustedes, ¿Queda claro?, así que no las quiero en mi vista aquí a partir de mañana.- La otra chica nos miraba con seguridad ante las palabras de Clarise y no tardo en girar su mano, en gesto de que nos retiráramos. Mire a Mía, pero no contuvimos reírnos ante tal escenario, nos alejamos del lugar sin antes añadir un poco de sabor - ¡¡Discúlpanos!!, ¡¡¡En realidad, no imaginamos que existieran personas tan inmaduras como ustedes en la universidad!!!- Desaparecimos en el pasillo para echar afuera nuestras risas vergonzosas.
Finalizo el descanso y continuaron las clases, para empeorar el día Clarise coincidió estar la ultima de ellas, no dejaba de quitarme la vista de encima, hasta que por fin termino el curso de estudio y podíamos retirarnos. Al salir de ese salón mi corazón salto al ver a Kain entrar ahí mismo, en efecto no coincidieron nuestras vistas, pero si los extremadamente pintados labios de Clarise y lengua de el. Era tanta la intensidad con la que la besaba, sus manos sostenían sus rizos definidos teñidos en rojo, parecía la escena perfecta de una película. Justo aun lado de la ventana me encontraba yo, sin alguna expresión y de la nada mis mejillas se humedecieron en lagrimas que ardían conforme bajaban. Antes de que alguien preguntara, me dirigí a mi habitación.
Entré, mi vista estaba nublada, me senté frente ala puerta y comenzaba a sentir que el dolor salia en pequeños trozos de mi triste alma ilusionada. Sabia que todo era demasiado perfecto para ser verdad, creí que había sentido el amor, pero no, el destino lo destruyo todo. Una parte de mi me decía que estaba completamente celosa, siendo sincera si lo estaba. Admito que tenia curiosidad por besar esos labios grandes y delgados, el sabor que tendría, pero ahora es demasiado tarde y es una ilusión perdida.
(...)
Sin darme previa cuenta de las horas quede dormida en el suelo, la ventana anunciaba la luz de la noche, saque mi cartera, y decidí salir a tomar aire fresco. En el camino del pasillo saque el celular que tenia desde clases, verifique la hora y eran las 9:00 aun alcanzaba para comprar un frappe y reflexionar un poco acerca del día de hoy. Me sorprendió en el recorrido que toda la Universidad se encontraba en completo silencio, seguramente, estaban en una fiesta que es lo común de aquí. Llegue y pedí el frappe, la cajera me observaba con curiosidad, sin dudar un poco, supe que tenia grandes ojeras ya que llore hacia un rato, me voltee para fijar el lugar donde me sentaría a pensar pero...
*Disculpen por no actualizar ( no tenia muchas ideas)* Agradezco el tiempo que tomaron para leer
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Viento de Ilusiones
Ficțiune adolescențiMe he Ilusionado en demasiadas ocasiones, jamas creí en haberse dado por hecho algunas de ellas. He sufrido al igual que tu, Me he sentado en soledad, esperando a que algo impresionante cambie por completo mi destino... Pero sin embargo me han last...