#1. Hello from the other side

280 27 5
                                    

Harry daba vueltas en la cama intentando conciliar el sueño sin ningún éxito, pero sabía perfectamente la razón de eso. Su mente rondaba al rededor del sueño que había tenido hace tan solo unos minutos, ese sueño era común y corriente, pero lo que logró llamar la atención del joven rizado fueron las voces que se oían acercarse desde las lejanías, a través de las montañas...
Harry se encontraba corriendo de un lado a otro, junto a su pequeño cachorro Connor, por los campos floreados que yacían cerca de unas montañas de colores violáceos, un espectáculo natural completamente bellísimo, y la parte que más amaba Harry de ese lugar es que él estaba en paz sólo con Connor haciéndole compañía, quien se recostó y olisqueó unas pequeñas flores de diversos y llamativos colores, Harry lo siguió y se recostó a un lado de su pequeño amigo, acomodó sus manos a cada lado de su cabeza y inhaló el aire puro que aquel lugar le brindaba, para después soltar el aire acumulado. El rizado giró su cabeza para observar que su pequeño cachorro se había dormido, sonrió negando levemente la cabeza, para después clavar la vista en las montañas, eran un gran paisaje, el más hermoso que él ha visto en toda su vida, parecía un dibujo de esos antiguos. Aquellos que resaltaban por el detalle que los artistas les brindaban. Harry se sentó de golpe por la voz que se oyó desde las lejanías, por entre las montañas. Él conocía esa voz, por supuesto que lo hacía. Se levantó de una manera tan brusca que logró despertar al pequeño Connor. Comenzó a trotar, adentrándose entre las montañas. La voz se hizo más clara y logró oír lo que está le decía. En ese momento aquél joven sintió sus ojos acuosos.
"Harry..." La voz lo llamaba, lo hacía una y otra vez, y no parecía tener intención de detenerse. Se acercó a una montaña pequeña y apoyó allí su mano intentando recuperar el aire perdido sin mucho éxito. Connor olfateó el aire y salió disparado a lo que parecía era la cima de una pequeña montaña relativamente cercana. Harry corrió lo más rápido que pudo detrás de él, pero obviamente Connor era mucho más rápido que él. El rizado corría con toda la velocidad y energía que poseía en esos momentos, pero para su suerte, era la suficiente. En un momento logró divisar al pequeño perro quieto, estático, observando algo fijamente. Lentamente él se acercó a su mascota y quedó igual o peor que Connor.

Frente a ellos se encontraba el sueño que Harry siempre quiso tener desde aquel terrible día, pero nunca lo había logrado tener. Allí estaba él, mirándolo de arriba abajo, con esa sonrisa autosuficiente típica. Sus ojos zafiros lo miraron y brillaron con esperanza, adornando su bellísimo rostro por completo.

"¿Louis...?" Harry no podía creerlo, se acercó rápidamente a Louis y acercó su mano al suave rostro de este. En el fondo sabía que era un sueño, pero prefirió creer que eso era real.

"No hay tiempo p--No tengo mucho tiempo..." parecía asustado, verlo así hizo que el muchacho de ojos verdes se exaltara y preocupara, ya que Louis no era de asustarse por nada, eso debía ser algo en serio grave. "Necesito tu ayuda." susurró cerca del rostro de Harry.

"L-Louis... déjame ayudar en al--" el ojiazul lo irrumpió con brusquedad, si no decía lo que tenía que decirle, sólo Dios sabía cuando podría volver a conectarse con la mente del rizado.

"Puedo volver, solo... necesito tu ayuda..."

"D-dímelo... ¿en que puedo ayudar? Haré lo que sea" la desesperación era notoria en la voz de Harry, él lo sabía pero le importaba una mierda, su gran y único amor necesitaba de su ayuda y él haría todo lo que estuviese a su alcance para ayudarlo, y ambos sabían que hasta más. Louis curvó una sonrisa, una sonrisa cínica, para luego cambiarla por una sonrisa de alivio. Harry jamás notó la diferencia entre una y otra, estaba demasiado encantado con el hecho de que su amor estaba frente a él, como en los viejos tiempos. Exactamente igual a ellos.

"Hoy no podrá ser, bebé... se acabó mi tiempo aquí, pero mantendremos el contacto, lo prometo." se acercó a Harry con un pacífico caminar y depositó un casto beso en cada una de las mejillas de este. "Hasta el próximo sueño, Harry..." y con eso, se acercó al acantilado y, sin más, se arrojó a él, extendiendo los brazos y soltando una pequeña risita. Harry sin poder evitarlo, corrió y se arrodilló para ver como Louis impactaba contra el agua.

Harry recordaba cada detalle de ese sueño como si hubiese sido real, como si de un recuerdo se tratase, pero estaba claro que no lo había sido y eso era lo peor, no podía haberlo sido. Louis había muerto trágicamente en ese accidente y así se quedaría, era estúpido de su parte esperar que lo que acababa de suceder en ese sueño, incluyendo la conversación, iba a hacerse realidad. "Está claro que no, ¿verdad?" Esas preguntas rondaban una y otra vez por la mente de aquel muchacho, de pronto el ruido de un mensaje entrante lo hizo sobresaltar. ¿Quién será a esta hora? pensó Harry. Estiró su brazo con cierta intriga y mordió su labio. El mensaje lo dejó pálido.

"Puedo volver, Hazz... pero necesito tu ayuda." Las manos le temblaron de pronto, su piel se erizó y en su nuca sintió una fresca brisa, su mente se nubló, al igual que su juicio. Una vez que pudo cerrar su boca, mordió su labio con más fuerza y sin pensárselo dos veces, Harry se puso de pie y se dirigió a la casa de Niall, necesitaba comprobar que no estaba demente. Aunque sabía que su amigo le diría exactamente eso. Tomó su chaqueta, las llaves de su auto y salió, sin importar que tendría que conducir descalzo. Su mente no podía dejar de funcionar, no descansaba nunca, y no comprendía la razón, pero ya la sabría... O eso esperaba.

"I'm so sorry, Darling" AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora