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Dedicado a @FantasySesshxKag

Una punzada de dolor en el costado la hizo cuestionarse lo que había sucedido. No recordaba muchas cosas, y tampoco es que le apeteciera mucho recordar, al menos no en ese momento, ya que la claridad se hacía cada vez más fuerte y le impedía seguir descansando. Con pereza procedió a abrir los ojos; le tomo unos segundos poder enfocar bien. Lo primero que vio fue las hojas de los árboles meciéndose al compás del viento.

"¿En dónde estoy?" Pensó la Miko sin moverse de su lugar.

-Jaken-sama ¿Cree que Kagome-chan despierte pronto? -Escuchó una voz bastante conocida que se iba acercando.

-Yo que sé, mocosa. No puedo creer que el amo Sesshomaru la haya traído. -Dijó la otra voz con reprobación.

"Sesshomaru" Ese nombre resonó en la mente de la azabache dejándola más desorientada de lo que estaba.

-Rin. -Pronunció con algo de dificultad ya que su boca se encontraba seca.

-¡Kagome-chan! -Exclamó la niña con alegría acercándose a ella a toda velocidad. Se detuvo junto a ella y se arrodillo para quedar a su altura. -¿Cómo se encuentra? ¿Ya no le duele la herida? -Preguntó con un deje de preocupación en su voz.

Kagome se levantó rápidamente al escuchar la palabra herida, lo que hizo que se ganara una fuerte punzada de dolor en el costado. Soltó un pequeño gemido a causa del dolor, lo que fue suficiente para preocupar a la pequeña.

-¿Esta bien? -La niña la ayudo a recargarse con cuidado en el tronco del árbol en el que había estado descansando.

-Gracias. -Agradeció mientras ponía su mano izquierda en su costado. -¿Qué sucedió? -Cuestionó confundida.

-Esa herida es obra de Naraku, si no hubiera sido por el amo Sesshomaru ya estarías muerta.-Respondió Jaken con un brillo de admiración en los ojos al hablar de su amo.

Al escuchar eso, los recuerdos comenzaron a desfilar por su mente. Había detectado la presencia de los fragmentos de Shikon, por lo que habían ido hacía la dirección de la presencia. Al llegar, se llevaron la sorpresa de que se trataba del mismo Naraku, junto a una de sus exenciones: Byakuya. La pelea no tardó en iniciar, y las cosas no se veían bien para ambos. Kagome se encontraba junto con Shippo manteniéndose al margen como se lo había prometido al medio demonio, hasta que vio como algo que se acercaba a gran velocidad, aventó a Shippo a un lado, pero no le dio tiempo de esquivar y antes de que Inuyasha llegara, uno de los tentáculos de Naraku había logrado darle en el costado izquierdo. El dolor no tardo en aparecer, pero lo peor de todo no fue eso, si no que la pelea sestaba desarrollando en una montaña, así que a causa del golpe salió volando directo al vacío. Mientras caía, Kagome pensaba en que ese sería su fin, después de eso, con su vista borrosa vio una esfera de luz blanca, y de ahí todo se volvió negro.

-Humana. -Escuchó decir a una voz inconfundible. Rápidamente volteo a verlo y se encontró con Sesshomaru con el torso desnudo. La azabache ante esa visión no pudo evitar sonrojarse.

-Sesshomaru... -Susurro sin despegar su vista de él. No podía creerlo, la había salvado.

-¡Humana insolente! -Escuchó reclamar indignado al sapo. -¿Cómo te atreves a dirigirte así al amo? Muestra más respeto por quién te salvo tu inútil vida. -Fue interrumpido por una pedrada que le lanzó el peli plata.

-Callate, o te mato. -Dijó con voz fría y una mirada nada amable. Jaken al escuchar eso adoptó una expresión de terror y comenzó a disculparse con su amo.

Kagome llevó su vista a su regazo y notó algo diferente. Su uniforme había desaparecido y era reemplazado por el haori de Sesshomaru. De forma inevitable, el color se estableció en su rostro.

One Shoots •Sesshomaru x Kagome•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora