¡Amor! ... Y bardo. (MSB #3)

7.- Desfilando ando 1/2

La noche del viernes pasa muy tranquila, todos con grandes aspiraciones para mañana.

Melani duerme plácidamente, ya que mañana vería a Joshu y bebería un poco de ese licor que tanto ama: Vodka.

Claro, negando que tiene una conversación pendiente con su ex novio.

Joshu juega con Pikachu Pulgoso pensando en su pequeña castaña, tiene que arreglarse bien atractivo para ella, y por ende ordenar su alocado apartamento.

Lia habla por Skype con Wendy unos minutos y después se dispuso a dormir, pero es imposible. Su mente le hace jugarretas... Entre ellas imaginarse como novia de Joshua.

Edgar por su parte hizo algo que a su abuela le sorprendió: No fumó esa semana. Mañana enfrentaría a Melani, porque donde está Joshua, está su ex novia y la chica que a pesar de romperle el corazón, aún le saca suspiros. Lo más tierno, suspira dormido, pensando en ella.

Wendy jugaba videojuegos en el avión, llegaría a la ciudad dos horas antes del desfile, estaba muy emocionada por volver a su tierra.

Danny y Steph visitarían Venezuela luego.

—Buenos días, hermanita menor. ¡A levantarse! —chilla Melani abriendo las cortinas de par en par, la luz reflejándose en la cara de la peliverde.

Lia se irrita.

—¿Qué quieres Miel?

—Decirte que el desayuno está listo, yo me voy ya mismo al desfile.

—Pero Melani... son las... —Mira el reloj de cerditos en la pared—, apenas son las ocho de la mañana, esa vaina va empezando tipo 11.

—¡Chao contigo! —Y sale de la casa a encontrarse con Joshua.

Lia rueda los ojos, como si ella no supiera lo obvio de su encuentro con Joshu.

Melani sale hasta la parada, esperando a que la buseta la lleve a su destino: El apartamento de Joshua.

De tan sólo pensarlo se sonroja, ¿estarán solos?

Sacude su cabeza, ¿qué cochinadas está pensando? ¡Los condones están caros y Joshua nada en la pobreza! El sueldo de Euro Bar no alcanza para nada. 

En realidad ningún sueldo en Venezuela alcanza para algo, pero bueno...

Mensajes de Texto.

J: ¿Dónde estás? Llégate -.-

M: Mira coño e' tu madre, en la buseta me pueden robar. YA VOY LLEGANDO DEJA EL DESESPERO.

Chat de WhatsApp.

L: EDGAR VE RÁPIDO A CASA DE JOSHUA

E: ¿Qué?

L: PARA ALLÁ VA MELANIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII

E: ¡PERO YO NO SÉ DÓNDE VIVE!

L: Al lado de donde yo antes me hospedaba, MUEVE EL CULOOOOOOOOOOOOOO.

E: Pero no me va a abrir...

L: Espera, tengo un plan.

Una rubia oxigenada pasea por su hotel, muy divertida porque extrañaba su país natal.

España es hermoso, pero no se compara con el lacreo de Venezuela, pensaba.

Su teléfono empieza a sonar, específicamente sonidos de unos rinocerontes fornicando, aquel era su tono de llamada.

No pregunten porqué tiene ese tono, Wendy es una caja de sorpresas.

—¿Aló?

—¡Wendy!

—No, soy un saco de patatas... Bueno no, si soy yo. Pero... ¿te imaginas? ¡Yo, un saco de patatas! Deliciosas y crujientes patatas —Hace un corazón con sus dedos.

—Chama deja las drogas.

—No me he drogado... todavía.

—Ajá sí... —dice algo traumada Lía—. Mira, ¿tú te estás hospedando en Barrio Obrero, no?

—Sipidipi.

Lia hace una mueca al celular, sacude su cabeza y prosigue:

—Necesito que acompañes a Edgar hacia el apartamento de Joshua.

—¡Okay! —Y cuelga.

Para Wendy, esto sería como una misión secreta.

Aunque se le olvida algo...

Un mínimo detalle... Bueno, después sabrá qué era.

—Agente 007 Wendy ¡Lista! —se dice a sí misma, extendiendo sus brazos, no sin antes hacer que un mesero se cayera a la piscina.

Ups...

—¡Ja! Primer enemigo... ELIMINADO. ¡Piu piu!  —Y hace una especie de pistola con sus manos, soplando sus dedos.

Y Lia la llama.

—¿No ves que estoy en una misión secreta, chama?

—No me preguntaste como es Edgar ni la dirección de Joshu, genia.

—Ese era el detalle que me faltaba —comenta entre risas la rubia a la peliverde.

—Si eres bruta vale —ríe en respuesta.

—¡Bruta no! Ocurrente.

Lia le envía una foto de Edgar y le da la dirección del apartamento, rezando en que el transporte público en el que transita su hermana se demorase, para poder así impedir que estos tórtolos estén a solas.

Melani refunfuña, el transporte está muy lento hoy y el tráfico no da para más. Mira por su ventana escuchando Still into you de Paramore, y divisa a lo lejos un chico blanco, alto de espaldas.

Su corazón se paró por un segundo, creía que era Edgar...

Pero no lo era.

Sacude su cabeza, la culpe la carcome viva. ¿Cómo pudo aceptar ir sola con Joshua, después de tremendo rollo con el pobre de Edgar? Se pasaba de mala persona.

Edgar buscó a Wendy en el hotel, estaba a sólo unas dos cuadras de su casa, y a otras dos más del apartamento de su amienemigo.

Lia saca de sus ahorros un poco de dinero, y busca el taxi más rápido posible hasta dar con la dirección del nalgón.

—¿Joshua? —pregunta la castaña tocando el timbre de su apartamento.

A respuesta, escucha los ladridos de un lindo perrito y una especie de discusión.

—¡NO TE ORINES ENCIMA MÍO HOY, YA OÍSTE! ¡O SI NO, ADIÓS PERRARINA! 

Melani ríe. Joshua abre.

—Buenos días, Miel.

—Épale oso. 

Nota mental para Joshu: Melani es una cortanota*.

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Cortanota: Una persona que, como su nombre lo dice, te corta la nota :v El que caga el momento jaja.