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Las brasas del fuego saltan cuando acomodo uno de los troncos. Aun no hace mucho frio, pero igual el aire es fresco. Esta noche me ofrecí a hacer guardia, el grupo duerme al rededor del fuego, a unos 3 metros. Mientras yo camino alrededor de la fogata avivandolá.
Escucho un ruido y cuando me doy vuelta alguien está levantandosé. Es Carl. Se dirige hasta el fuego y se sienta frente a él, lo mira fijamente, como si quisiera entrar en él, las llamas se reflejan en sus ojos.
"No le insisto, le hablaré cuando el quiera hablarme, cuando esté listo" me repetía todos los días, pero no puedo, no soporto verlo así y no poder hacer nada para ayudarlo.
-Carl-Lo llamé en voz baja y tratando de sonar dulce.
-Abbie-Él dirigió su mirada hacia mi.
-No me gusta verte así.-Sus ojos seguían puestos en mi y sentí la enorme necesidad de tirarme a sus brazos y decirle que todo iba a estar bien, pero no lo hice. Me tomó por sorpresa, se puso de pié e hizo lo que yo quería hacer. Me encontraba en sus brazos, yo lo abrazaba por su cuello y el me apretaba con sus brazos rodeando mi cintura. Por un momento pensé que no podía respirar, pero el aflojó el agarre y se me quedó mirando, noté que tenía los ojos rojos, había estado llorando. Una lágrima asomó por su ojo derecho y luego por ambos. Le tomé ambas manos y juntamos nuestras frentes, podía sentir su respiración pegada a la mia.
-No sabes cuanto las extraño...-Y esa sola frase me rompió el corazón. Quería ayudarlo, pero no sabía como, quería decirle palabras lindas que lo ayuden, pero nada lograba salir de mi boca, quería que nada de esto hubiera pasado. Por un instante quise besarlo. Sin querer algunas lágrimas salieron de mis ojos.
-Ven- Le dije soltándolo de una mano y guiandoló con la otra hasta al lado del fuego, donde nos sentamos uno junto al otro, coloqué mi cabeza sobre su hombro y la suya sobre la mia.-Dime-Agregué.
-Solo es que, las necesito, mi padre no habla del tema, solo me dice que ya soy grande y tengo que afrontar la vida, tomar el toro por las astas, y despues dice cosas como así es la vida Carl o Ya vendrán buenos momentos,los superaremos juntos. Aparte me enojè con la vida, hace tiempo que Dios no existe, por eso no les hablaba.-Dijo ya calmado.
-En parte tu padre tiene razón Carl, la vida es así, hay buenos y malos momentos, y si, vendrán mejores, superaremos los malos. Y tú elijes si creer o no. La vida es bella Carl, por más que haya pasado esto, si no pasaba nunca hubiera conocido a Enid, ni a Ron...- Quería tratar de hacerlo reír, por eso esperé unos segundos y luego agregué- Ni al mejor sheriff de todos, que es valiente, fuerte, que admiro aunque sea irritable...- Carl me miró yo a él- ...Y que es mi mejor amigo.
Conseguí una leve sonrisa y luego una pequeña carcajada.
-Te extrañaba- Dijo con una sonrisa.
-Yo más.

En ese momento se despertó Daryl, que seguiría haciendo guardia para que yo duerma un poco.
-Vayan a dormir, yo sigo.- No protesté, estaba muy cansada.
-Hay un espacio al lado mio si quieres- Dijo Carl. Yo asentí y nos dirigimos hacia allí.

Una vez acostados, me acomodé para mirarlo.
-¿Estás mejor?
-Si,¿tu?
Afirmé con la cabeza.
-Buenas noches-Le deseé.
-Buenas noches Abbie, gracias.- Y cerró los ojos.

-Rick, mirá a Maggie.- Rick la observó, caminaba junto a Glenn casi al fondo de la caravana, agarrandosé la panza, cada vez estaba más debil, y el embarazo pronto cumpliría con su tiempo.
-No le queda mucho tiempo, un mes, tal vez dos.- Contestó Rick volviendo la mirada hacia el frente y aminorando un poco el paso.
-Rick- Dije frenandoló, el grupo aun estaba algo lejos de donde estábamos- Hablo en serio, necesitamos encontrar un lugar donde pueda parir, sabes que hay posibilidades de que muera. Tenemos que encontrar un doctor y rápido. A Glenn se lo nota inquieto y se que es por eso.

-Abbie, escucha. Lo sé, pero no puedo hacer nada mas que seguir caminando y buscar refugio.

-Ya sé, solo que quiero ayudarla, a todos.

-Ayudas un montón, confía en mi, ve a atrás a descansar un poco.

Enid me recibió con una sonrisa y caminé a su lado.
-He visto a Carl riendo con Ron, creo que hiciste un buen trabajo anoche.-Me dijo sonriendo.
-¿Qué?- Dije nerviosa.
-Anoche, digo, los vi hablando junto al fuego, hasta pensé que iba a besarte. -Rió
-Ya empiezas...-Rodé los ojos.
-No no no, lo digo en serio, te miraba como si deseara hacerlo, noté como se abrazaban.
-Solo somos mejores amigos ¿Si? Solo necesitaba una charla de amigos anoche.-Dije mirando el suelo.
-Está bien. -Ambas reímos y en ese momentó,mientras doblábamos la curva,Rick que estaba mucho mas adelante nuestro,se agachó y vino hacia nosotros. Su cara mostraba preocupación.

-Una horda, son demasiados y estamos muy débiles, nos desviaremos por el bosque y luego retomamos al sur pero mas al oeste, ¿Que dicen?- La mayoría votó que si y eso hicimos.

Nos encontramos con un galpón, o un tipo de granero, forzamos la puerta y entramos. Estaba vacìo.

-Voy a revisar arriba- dije empezando a subir las escaleras.
-Te acompaño- Carl empezó a subir luego de mi.

-¿Crees que es seguro?-Le pregunté.
-No so lé, espero que lo sea aunque sea por esta noche, mañana veremos que hacemos.- Dijo
-Si.-Caminamos hacia una ventanita en una esquina. Se escucuchaban los gruñidos alejandosé. Carl está a mi lado y apoyo mi cabeza en su hombro, él me abraza por la cintura.

Esperanza (CarlGrimes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora