Leyenda en un BAR

131 21 14
                                    

Entre bares aprendí el significado de varias canciones y cuanto peso tiene una pluma y un papel, frente a una copa de vino tinto.

Noches siguiendo mi instinto me enseñaron que el deseo puede llegar a ser el veneno más tóxico y la cura mas falsa.

Aunque no niego la adicción que provoca, unos ojos café y unos labios color carne.
Viva y ardiente, bajo la luz tenue de una luna de verano.

Un cigarrillo y una copa frente a la larga noche, desolada y siniestra.

Una guitarra afinando acordes desgarrados y notas sumisas.
Su silueta esbelta, bañada de sal. Danza sin miedo ante mi voz.

Esta ciudad sin nombre, este bar anónimo,
Arpegio silentes de este amor huérfano.
Únicos testigos de mi delirio.

Es su cuerpo u otro menos importante, pero que indispensablemente siempre me lleva allí, a la sombra de su alma gitana.

Son las conversaciones de las personas algunas gratas otras ingratas pero todas vividas.

Es la vida que pasa en un susurro, mientras canto a su oído otra triste melodía, erizando su piel de seda y acariciando sutilmente sus dudas.

Entre lo cotidiano y lo utópico ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora