Su mente divagaba mientras contemplaba una densa oscuridad; sus pensamientos lo agobiaban, lo atemorizaban.
La oscuridad era tan espesa que no sabia cuando pestañeaba, no sabia si sus ojos estaban abiertos o cerrados. Sentía que en algún momento alguien lo atacaría por detrás y se acabaría su historia, que moriría en ese sitio, desangrado y solo. Tal y como vino al mundo, lleno de sangre y solo. Sintió que estaba siendo demasiado ficticio para pensar eso, ya la soledad tenia un punto a su favor, aquel rotundo silencio estaba haciendo que Alex escuchara sus pensamientos como si lo estuviera gritando y que imaginara múltiples escenarios en el que muere o en el que escapa de aquel extraño sitio donde despertó horas antes.
A decir verdad, no sabia cuanto tiempo había pasado. Solo en esa habitación sentía que llevaba horas.Muy lejos de el, se notaba un brillo, como una luz. Esto primero le atemorizó, porque pensó que su pensamiento de un asesino se había vuelto realidad, al fin y al cabo, estaban en su mente, todo podía volverse cierto. Si fuera así, desearía una buena ducha, una siesta larga luego de una comida de su madre y por su puesto un buen trago.
Se cuestiono por un momento que podría hacer aquello que brillaba, no se movía. Pensó por un momento que era un diamante, pero ¿De que le serviría un diamante en aquel sitio? Descarto la idea casi de inmediato, tener dinero no le ayudaría de nada en donde se encontraba.
Pensó fríamente y se dispuso a caminar en dirección al extraño brillo en aquella oscuridad. Por mas que caminaba sentía que solo se hacia mas lejos el extraño objeto, por un momento un impulso lo empujo a corretear un poco pero ceso la idea de iniciar una carrera en aquella oscuridad, podría haber algún hueco que el no vería y podría lastimarse.
Luego unos minutos caminando como un alma perdida en algún circulo infernal, veía como se acercaba al objeto. Esto le animo y lo ayudo a caminar más rápido, debía alcanzarlo, quizás sea la salida.
A medida de que se acercaba el objeto brillaba mas, la verdad estaba muy lejos. Era un brillo incandescente, blanco como la luna. Cuando estuvo delante de el, tuvo que cerrar los ojos por un momento, se le hacia difícil ver con tanta claridad en aquel espacio tan hueco y oscuro.
Toco el objeto, era liso y frío, era claramente de metal. Lo rodeo lentamente para ver de que se trataba. Era un espejo.
Lo extraño de este espejo, es que no reflejaba nada, aun el estando delante de el.
Le dio algunos toques con los puños y en aquel vacío se perdió el sonido ahogado que produjo. ¿Que hacia un espejo en ese sitio? ¿En medio de la nada? Algún fin debía tener, algún truco.
Alex todavía estaba iracundo por el repentino empujón de Jack, pensaba que si llegaría a salir de ese sitio le daría un golpe en la cara tan duro que lo haría sangrar. Se sentiría mejor con ver algo de sangre en sus nudillos y a Jack sin una sonrisa en la cara.Cuando Alex, vio el espejo otra vez, este tenia algo distinto. Ya no era limpio y reluciente como cuando lo encontró. Ahora tenia marcas de dedos en el, y no eran suyos, intento limpiarlo y no logro nada. Se extrañó. Por un momento empezó a pensar que porque le daba importancia a eso, solo debía preocuparse en salir de aquella parte de su mente.
Escucho un susurro, un pequeña risa. Reconocía esa risa.—Parece que alguien no pago la factura de la luz a tiempo. –Dijo Jack con el tono pedante que acostumbraba a usar.
—¡Maldito! ¿Donde estas? ¿A donde demonios me metiste? ¡Eres un maldito, Jack! ¡Un miserable y desgraciado maldito! Cuando te vea...
—¿Me estas amenazando, Alex?¿Estas enojado conmigo? Vamos, cariño. Sabes que muy en el fondo siente algo lindo por mi. Solo te di un empujón mas a la verdad, es que a veces eres muy lento y bueno, tuve que hacerlo mas literal para darle mas picante a esto.
—¡Dime donde estas! ¡Dime donde estoy! ¡Sacame de aquí desgraciado!
—Mira hacia el espejo, idiota.Alex se volvió hacia el espejo y pudo observar borrosamente, la extraña silueta de Jack, dedicándole una saludo ordinario con su mano izquierda y tocando el espejo con su puño derecho. Jack acerco la cara un poco mas al espejo y Alex pudo notar la cara de Jack, como si aquello fuera un extraño juego, una sonrisa de alegría por ver a un viejo enemigo o quizás por ver sufrir a un enemigo. A ese punto Alex se cuestionaba la utilidad verdadera de Jack.
—Vamos, se que puedes deducir tu solo en donde estas y como salir de ahí.—Dijo Jack
—Sabes que no puedo hacerlo.
—¿La palabra “Conciencia" no te dice nada?
—¿Esto es mi conciencia?
—Hasta un niño se daría cuenta mas rápido de las cosas que tu, Alex. ¡Estas en tu conciencia! Tu asquerosa y mugrienta conciencia. ¿Por que crees que no hay luz? De no ser por este espejo que nos separa, y que te alumbra, estuvieras inmerso en la oscuridad llorando como un chiquillo que perdió a su madre en un centro comercial. ¿Sabes como hacen para limpiar un tanque de agua? Lo vacían, luego cierran las llaves y se dedican a limpiarlos. Pero lo primero que hacen es eso, vaciarlo. ¿eso tampoco te dice nada? Vamos, no puedo hacer todo por ti, creo que iré a fumar un cigarrillo, espero que salgas rápido, la comida se enfría. —Risa sarcástica— creo que me dedicare a comediante un día. ¿Que te parece a ti?. Hasta luego Alex, no olvides apagar la luz al salir.Entonces Jack desapareció. Alex se pego al espejo para tratar de verlo y no tuvo éxito.
Vaciar, vaciar. Repetía esa palabra sin fin en su mente. Algo tenia que hacer con esa palabra.
No se le ocurría mucho. Unas cuantas ideas inútiles. Sabia que el espejo era la salida. Pero, ¿como lo cruzaba? Era duro, y temía romperlo y quedarse en ese sitio encerrado.De pronto se le ocurrió una idea. Necesitaba vaciar su conciencia, era eso. Aceptar, confesar y vaciar. Era eso lo que debía hacer.
Se puso frente al espejo, miro fijamente aquel espejo, respiro profundo y de golpe todo lo malo que había hecho en su vida y todo lo que había guardado por años, se puso delante de el. Podía ver a su al rededor las imágenes que había tratado de olvidar por años. Cuando robo por primera vez, cuando golpeo a su ex novia en la cara luego de una pelea, las veces que vivió despreocupadamente, todas las mentiras que dijo sin pensar, todo. Todo lo que se arrepentía, estaba ahí. Por años había guardado cosas en su conciencia y había dejado que lo atormentaran día tras día. Ese día dejaría atrás su pasado. Ese día el soltaría esa ancla que ha llevado por años. Sin pensarlo una lágrima salio de su ojo derecho, esto le sorprendió. Los recuerdos oscuros de su conciencia siempre le habían producidos dolor.De pronto, el espejo comenzó a brillar mas...
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Introspección.
Mystery / ThrillerUna habitación desconocida, oscura, con un aire frío y macabro. Ahí despertó Alexander Modrost, sin recuerdo alguno de como llegó a ese sitio. Ansioso por escapar de ese lugar, recorre el largo pasillo que estaba enfrente de el y abre la única puert...