Capitulo 8

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9 de febrero.

Matías se levanto temprano, temprano era tipo 11:00 Am , hizo sus obligaciones, las que le corresponden a diario.

Irían a ver a los Bunkers, había pasado toda la tarde planeando esa tarde, ese momento que esperaba con ansias. Se paró frente al espejo y comenzó a practicar una conversación.

- Alex, debo decirte algo..., no eso no – negaba- Adivina que...

No sabía como hacerlo, en su mente todo parecía mas "fácil", su celular comenzó a vibrar, lo sacó de su bolsillo trasero, puso su clave y se encontró con un mensaje

- "Mati vine a la playa con mis primos, pero llegaré para que vayamos "- Releyó el mensaje una y otra vez, el raro presentimiento de que todo saldría mal se apoderó de su mente.

Las horas pasaban, lento, pero pasaban, Faltaba un poco mas de una hora para que comenzara el concierto al aire libre, nuevamente el celular vibra

- "Mati, vamos mis primos nos llevaran "- Sonrío y salio de su casa, una camisa a cuadros, ese poleron gris, y unos jeans era lo que llevaba puesto.

El trayecto fue corto y silencioso. Al bajarse del auto el la acompaño en la eterna búsqueda de un lugar en el que pudieran recargar el teléfono. Iban juntos tomando una bebida energética

-Toma un recuerdo – Saco la chapita de la lata, era color verde.

- La pondré en un collar – Le sonrío amplio y beso su mejilla- Gracias – Sus manos no se despegaban.

Matias podía sentir ese olor a protector solar y perfume que provenía de ella, Simplemente le encantaba. Regresaron al parque, y la sorpresa fue que este ya estaba repleto

- Diablos, estábamos solos, y en tan solo unos minutos se lleno – Miró a su compañero ruloso y arrugo su nariz

- no importa, encontraremos un lugar – tomo su mano con firmeza y la ayudo a pasar entre la gente, había una mezcla de olores, cerveza un olor a marihuana una mezcla entre ambas.- ¿Aquí esta bien? – Ella asintió y matias la encerró en sus brazos.

Después de media hora por fin comenzaba el concierto, cada cinco minutos se miraban y se besaban, coreaban las canciones a medias, mientras el le echaba una repasadita a su plan...

Llego la hora de irse , caminaron por todo el parque, cuando se acabo la hilera de gente, El habló.

- Alex, tengo que decirte algo – su rostro representaba seriedad.

- ¿Que ocurre?

- Es algo importante – la miró y sonrió a medias

- ¿Me dirás que eres Gay ? – Ella soltó una carcajada – Matias negó de inmediato

- Me regreso a Santiago – El rostro Alexandra cambio, la sonrisa se esfumo en un abrir y cerrar de ojos.

- Ah – no podía decir más – El chico comenzó a reír.

- ¡Es broma! – Apegó el cuerpo de Alexandra a el y la abrazó.-

- idiota – Afirmo su cabeza en pecho de Mati.

- Hablando en serio. Quería decirte que – comenzó a titubear – Me encantas, Me encantan tus ojos, esos ojitos que brillan en estos momentos, tu sonrisa, es hermosa, esa risa contagiosa, me encantan tus bromas, y que sean la persona más jugosa que conozco, me encanta tu cabello, con esas puntas verdes... Me encantas Alex, y... quería preguntarte si, Te gustaría ser mi novia. – Alexandra escucho todo con claridad, pensaba en todo lo que Matías le había dicho, Dios, estaba tan nerviosa no sabía que responder.

- Estás seguro – Preguntó, su rostro no se apartaba de su pecho

- Muy seguro – le aclaró con firmeza

- ¿Pero seguro que quieres estar conmigo?

- Si Alex, no puedo estarlo más... - Matias comenzó a ponerse nervioso, ¿y la respuesta en que momento?, no podía aguantar, Alex estaba pensándoselo mucho

-Soy muy tortuga para mis cosas, me gusta ir lento

-Iremos lento 

- ¿Lento lento lento?

-Lento lento lento - sonrió 

- Entonces vamos a ser novios- Claramente fue la respuesta más tonta que pudo dar, y era entendible, Alexandra nunca se había pensado tanto el estar con un chico, le habían roto el corazón un par de veces, y quería analizar todo antes de dar un veredicto. Caminaron muy felices hasta la esquina en donde los pasarían a recoger "Sus ahora suegros "¿Así debía llamarlos?. Se abrazan, reían jugueteaban y bromeaban con la típica frase "Nueve de cada mes "Prometieron jamás hacer eso.

Vieron el auto aproximarse, disimularon todo lo que había ocurrido, se subieron y nada había ocurrido, aun que sus manos iban ocultadas mientas se entrelazaban

- ¿Y como estuvo? – Habló Nancy la mamá de Alex, le contaron todo Mientras recorrían las calles de noche, miraban hacía afuera, claramente omitiendo lo que ocurrió entre ellos.


La noche había caído, el auto estacionado en las a fueras de la casa de su vecina indicaba que el día había acabado, ¿Cómo despedirse? Pensó, un abrazo, un beso en la frente, y cuando nadie estaba para mirar, ese esperado beso en los labios.

Era el comienzo oficial de esta historia.


Hola , hoy se cumplen dos años de este día, estoy muy feliz, intenté asimilarlo a ese  inolvidable Día . gracias a quienes se dan el tiempo de leer <3, y gracias a mati por permitirme crear esta hermosa historia. 



Mi nuevo vecinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora