Encuentros

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Después de que Tom se calmara continuó la dura jornada.

-Quiero 300 abdominales, y no quiero quejas, sólo una y son 100 mas.- hablaba con autoridad.

-Me rehúso a continuar con esto, no tienes derecho a obligarme, es más, me largo de aquí.- y así, Amethyst caminó para alejarse de él, pero antes de avanzar mucho lo escuchó hablar.

-¿Cómo piensas llegar?, si no lo recuerdas... Vinimos aquí en una motocicleta y no me imagino que tú seas capaz de llegar caminando. – ambos se miraban de forma desafiante.

-Vamos a ver...- Amethyst emprendió su marcha.

Cuando había caminado ya 15 minutos le pareció demasiado largo el recorrido, intentó pedir ayuda con algún auto que pasara por la zona, pero no eran muchos los que transitaban el lugar, desde el fondo de la carretera apareció un truck de color rojo, Amy le puso la mano con la esperanza de que parara, en efecto, el auto se detuvo.

-¿Necesita algo, señorita?- se notaba en él un acento campesino.

-Si señor.- ella no quería parecer desesperada pero realmente lo estaba.- necesito llegar a la ciudad... si usted pudiera hacerme el favor de llevarme.

-Claro que sí, belleza, por cierto, soy Ben pero todos me dicen Big Ben- él hablaba de forma muy efusiva.

-Yo soy Amethyst, mucho gusto.- ella se subió y el auto empezó a andar, pasó una hora y aún no llegaban y Amy empezaba a notar un paisaje muy diferente.- ¿seguro que sabe hacia dónde vamos?

-Claro que si.- él la miraba con malicia.

-Detenga el auto por favor, necesito bajar ahora mismo.- el paró el movimiento del carro pero le puso seguro a las puertas.

-Sí, supongo que aquí está bien.- se acercó a ella y la intentó besar pero ella hizo un movimiento de evasión.

-Déjeme ir, por favor.- ella suplicaba pero él continuaba intentando llegar a ella, afuera se escucharon unos pasos.- AYUDA.- Gritaba Amethyst pero Ben le tapó la boca con su mugrienta mano.

Los pasos se sentían más cerca, percibieron un sonido metálico y cuando menos pensaron, alguien habían arrancado la puerta del piloto de un tirón, el extraño agarró a Ben de la nuca y lo tiró contra el pavimento, el camionero intentó huir corriendo pero su salvador había sido mas rápido y lo devolvió al lugar donde había caído.

Amethyst bajó del automóvil y vio como Tom le daba una golpiza a Ben mientras este se quejaba, ella se acercó y detuvo los golpes que Thomas le daba a Benjamin.

-Detente, no te rebajes.- él detuvo sus golpes, puso a el maleante de rodillas al frente de Amy.

-Pídele perdón a la señorita.- pero Ben lo único que hizo fue escupir saliva con sangre en el zapato de ella.- no fue una buena decisión para ti... aunque es buena ya que puedo golpearte un poco más.- pero Amethyst lo detuvo.

-Espera, por favor.- Tom parecía sorprendido.- No podemos hacerle daño.

- ¿Qué propones entonces, chispitas?- sonaba extremadamente enfadado.

-Le borraré la memoria y jamás podrá hacerle esto a nadie más y tampoco podrá recordarnos a nosotros, eso es una gran ventaja.- él lo pensó.- pero antes.- Amethyst cogió impulso y le dio una gran patada en la entrepierna a su abusador y así el cayó desmallado, entonces ella cogió su cabeza y todo el lugar tomó brillo y así lo dejaron inconsciente y se fueron en la moto de Tom.

Cuando llegaron él estaba bastante callado, ambos entraron en la casa pero no se percataron que Galicia los estaba esperando.

-¿Quién es él, Amy?- su madre parecía muy prevenida.

-Es... solo un amigo...- Los nervios la invadieron.

-Mucho gusto, Tom Hiddleston, a sus órdenes.- y se dieron la mano en señal amistosa, pero entre ambos se miraban con altas sospechas el uno del otro.

-Bueno, vamos a subir a mi habitación, hasta luego, mamá.- le dio un beso en la mejilla y así ambos pasaron al cuarto de Amethyst.

Tom aún seguía muy callado y se quedó parado en el marco de la puerta.

-Lo siento mucho... por todo.- Sonaba verdaderamente arrepentida.

-¿Qué harás para remediar lo que hiciste?- su tono era inquisitivo.

-¿Qué quieres que diga? "gracias".- dijo haciendo énfasis en las comillas.- o tal vez... que volveré a entrenar hasta que tu consideres que sea necesario.- él esbozó una sonrisa.- y lo siento...

-Disculpa aceptada, espero que para la próxima no seas tan terca.- sonrió de nuevo.

-Entonces... ¿cuándo empezamos de nuevo?- no sabía por qué pero estaba entusiasmada por el nuevo comienzo.

-Por ahora te dejaré un tiempo, necesito saber algunas cosas, estarás sola por una temporada.- se quitó de donde estaba, bajó las escaleras y salió de la casa, no era la despedida que ella esperaba.

Los días después de eso fueron normales, por el momento no había sufrido ningún ataque de mis poderes, estaba caminando por los corredores del instituto, con los libros en las manos y pensando en Tom, cuando algo colisionó con ella.

-Lo siento mucho.- dijo una voz mientras recogía los libros de ella y luego la ayudó a levantar, cuando se miraron a los ojos ambos se quedaron paralizados, él era rubio, de ojos color miel y encantadora sonrisa.- ho....la....- su tartamudez era muy tierna.

-Hola.- respondió ella muy segura de sí misma.- gracias por la ayuda.

-Pues... de nada... igual yo te tumbé.- y se rio, su risa era contagiosa y ambos rieron muy animadamente.- creo que por eso te debo un café.

-Es lo menos.- continuaron riendo.- por cierto, Amethyst.

-yo soy Dylan.

La Criatura Del Poder {Tom Hiddleston}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora