-¿Dónde has estado? Has llegado demasiado tarde- Se despojo de su bufanda y gorro, se sentó enfrente de su laptop, comenzó a buscar su carpeta de música.
Soltó un suspiro ignorando al hombre de su lado.
-Te estoy hablando, Min- Pateo la silla en la que se había sentado Yoongi.
-Te estoy escuchando.
-¿Acaso no sabes que cuando tu hyung te habla tienes que contestar? ¿Qué nunca te enseñaron modales? Chiquillo estúpido.
Amaba trabajar en lo que tanto le apasionaba, pero lo que odia de su trabajo era el hijo de su socio. Lee Ho Won o Hoya (su apodo artístico), el chico era mayor que Yoongi pero actuaba de manera déspota y arrogante, lo que más le molestaba es que también amara la música y fuera precisamente rapero como él.
-No soy tu dongsaeng, jamás querría un hyung como tú. - Alboroto su cabello e hizo una mueca de desagrado.
Dio una risa sarcástica - Sunbaenim, dime sunbaenim- El chico tenía como pasatiempo hacer enfadar al rubio.
-¿"Sunbaenim"?- río -Eres mayor, sin embargo, no con más experiencia en esto. Tu edad no refleja la experiencia o sabiduría ¿Eres estúpido?- cansado de la conversación se puso su bufanda y gorro.
-¿A dónde vas? No porque tienes la mitad puedes irte sin haber trabajado algo-.
Lo ignoro completamente tomando su celular y el cargador que tenía en su escritorio.
Se paró, lo tomó del brazo. - Mierda Suga, sí al menos me hicieras caso yo quizás fuera más gentil. Probablemente ya hubiera conseguido que papá te pusiera como dueño de esto ¿Eres tú el estúpido?- volteo a verlo.
No reflejo ninguna emoción, lo miro como si estuviera viendo exactamente a la nada.
- No soy un chupa pollas, ya te lo dije. - tiro de su brazo logrando zafarse, lo miro asqueado.
Camino hacia la puerta.
- Y si lo fuera, jamás te haría caso. Eres un asco de persona. - salió del lugar.
Probablemente al irse le traería problemas con su socio, pero no podía soportar más tiempo estar al lado de su hijo, era cansado y lo aborrecía conforme el tiempo avanzaba.
Miro la hora de su celular, aún era temprano y probablemente el restaurante que a menudo iba se encontraba abierto. Más que por la comida, que en realidad era bastante buena, iba por el dueño del lugar; se había vuelto amigo cercano del chico y cuando lograba encontrarlo en el lugar entablan una conversación confortable. Dudaba si podría encontrarlo, ya que el chico era de Seúl.
Entro al lugar, se quitó el gorro y como de costumbre se sentó en la mesa de siempre.
- Oh, Yoongi-oppa ¿Termino temprano?- la mesera corrió a sentarse enfrente de él, Yoongi la miro y dio una media sonrisa desinteresado en lo que le fuera a decir - ¿Quieres lo de siempre?- Asintió, se paró dándole como siempre una sonrisa - Ahora lo traigo.
La chica era demasiado bonita, un figura envidiable y probablemente la mejor que haya visto. Su rostro, en verdad era de ensueño y a veces se preguntaba el por qué se encontraba trabajando ahí, siendo tan bella podría estar de actriz o modelo. Pero realmente no le importaba, no le llamaba la atención de esa manera.
- ¡Yoongi!- Alzó la mirada, le sonrió ampliamente - Tenía pensado irte a ver cuando cerrará ¿Qué haces aquí? - se sentó en el mismo lugar que la mesera.
- Me dí el día libre- sonrió.
- ¡Mentira! ¡No puedes! Tú siempre estas metido en tu trabajo ¿Qué pasó? ¿Te sientes bien?- río junto con Yoongi - Pasa algo ¿Cierto?
La mesera llego, dejó el plato en la mesa.
- Eh ¡Injusto! Jin oppa llega y él sonríe, yo le hablo y me ignora, es difícil- Suga río.
- Minha, ¿Acaso no te has dado cuenta? Somos novios ¿No es lógico que le sonría solamente a su novio?- tomó las manos de Yoongi entre las suyas.
-¡No puede ser! Tan guapo que es ¡Ash! Está bien, los apoyo sólo porque ambos son guapos- entro un cliente y corrió a atenderlo.
-¿Novios?
- Al menos te la quite de encima ¿No? Agradéceme- Soltó sus manos. - ¿Qué pasa? Cuéntame.
-Tsh- tomó el cubierto y dio un sorbo a su comida - Estoy cansado, quiero darme un tiempo con la música.
- Y ¿Qué te dijo? ¿No está furiosa?- dijo con ironía - Hablas como si fuera tu novia y necesitarás un consejo para romper con ella.
Suga río, de hecho así lo sentía y prácticamente así la quería.
-No me ha contestado, hyung - siguió el juego - No, en realidad, quiero hacer otra cosa pero no sé qué hacer. Hoya me sigue acosando, no puedo hacer música tranquilamente, pero tampoco es como si quisiera encontrar otro lugar, que puedo, y seguir trabajando en lo mismo. Simplemente, no quiero seguir con la música... por el momento- dio otro bocado.
- Bien, eres bueno en lo que haces y siempre he estado sorprendido con la dedicación que le pones. ¿Sabes? Amo cocinar, pero no me veo el resto de mi vida haciéndolo... jamás te lo he dicho pero canto y quiero intentarlo. - mordió su labio - Y yo que quería pedirte ayuda.
- Puedo hacerlo, no me molesta hyung.
- No, no, primero quiero que tú encuentres lo que quieres hacer, no quiero que estés indeciso con tu futuro. - Suspiro - Vente a Seúl conmigo, probablemente encuentres un buen trabajo ¿Te parece?
Los ojos de Yoongi brillaron, en su mente llegaron dos nombres: Kim Namjoon, Jung Hoseok.
- Puedes buscar a tus amigos, me pondré celoso pero no hay problema, ellos llegaron antes que yo.
En realidad, no se habían hecho amigos por las recurrentes idas de Yoongi, más bien, Jin lo había ayudado a pasar un trago muy amargo cuando necesitaba un hombro en el cual recargarse.
Una noche saliendo de su trabajo, Hoya, había planeado acostarse con él fuera lo que fuera, había deseado al rubio por mucho tiempo que prácticamente lo miraba como si fuera de su propiedad. Yoongi aún se encontraba dentro del lugar, era el único que quedaba y se hacía cargo de dejar todo en orden. No se percató en que momento Hoya entro al lugar, sólo sintió unas manos al rededor de su cintura. Creyó que era una broma del mayor pero noto lo serio que iba por la fuerza tan grande con la que lo apretaba contra su cuerpo, desenfocado con lo que pasaba trato de zafarse pero era más fuerte que él.
No logro hacer nada porque por suerte el padre de Hoya entró, pero Yoongi recibió demasiados golpes en su rostro y cuerpo. Su socio quiso ayudarlo, estaba sinceramente preocupado por su estado pero ignorando las palabras del hombre y salió del lugar, caminaba desubicado he ido por la calle y fue donde lo vio Jin, el chico más bueno y agradable del mundo. Le hablo tratando de capturar su atención pero fue en vano, sin pensarlo lo subió a su coche y lo llevo al restaurante que recién había abierto.
No hizo mucho, curó sus heridas y espero a que el chico viniera en sí, pero lo único que sucedió es que llorará hasta quedar dormido en los sillones del lugar.
Después de ese incidente, Yoongi le tomo confianza y cariño, le contó sobre su vida. Jin se preocupaba mucho y lo trataba exactamente como cuando su tía lo hacía, parecía que era una mamá y le agradaba. No lo decía, pero Jin se había vuelto su tercer mejor amigo.
- Cállate - río - Pensé en ellos, quiero verlos.
- ¡En verdad me pondré celoso! ¡Ah, mi corazón de ajumma no lo resiste! - apretaba su pecho de manera dramática.
Soltó una carcajada, negó con su cabeza -Voy contigo a Seúl, hyung.
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Infinite 7u7, probablemente hayan muchos grupos por aquí...
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Efecto Lujurioso
RomanceMin Yoongi, un chico que por azares del destino perdió a sus padres y tíos. Sus únicos dos mejores amigos también han terminado yéndose a la capital de Corea del Sur, Seúl. Despues de un tiempo, cansado de su vida solitaria y monótona, decide probar...