Un Afortunado Accidente

Capitulo 1 "Secretos"

Mi madre últimamente se comportaba muy extraño, lucia triste y misteriosa, todas las tardes contemplaba el atardecer por su ventana, parecía que estuviera esperando algo, muchas ideas cruzaban por mi cabeza pero ninguna me agradaba. Días antes mis padres discutían todo el tiempo, el ambiente en la casa estaba insoportable, quizá mi madre estaba deprimida por lo sucedido, sin embargo decidí investigar que estaba ocurriendo.

Era Viernes por la noche y el ruido de un carro me despertó, baje de mi cama y me puse la bata que se encontraba tirada en una parte de mi cama, abrí la puerta de la habitación tratando de hacer el menor ruido, me dirigí hacia las escaleras cuando la imagen que vi me dejo sin aliento alguno, era mi padre gritándole a mi madre, quien le rogaba que no se fuera, que no nos abandonará, pero lo que paso toda vía me deja fría, vi como su mano se acercaba a su hermosa cara y la golpeaba en una mejilla, mis piernas hicieron que todo mi cuerpo se levantará y empujara a mi padre fuera de la casa, cogí sus maletas y las tire a la carretera y de mi boca salieron palabras que jamás pensé que diría: Lo Odio, Vayase y olvide que tiene una hija... El llanto de mi madre me enfureció más y el ruido que se escucho fue de la puerta del carro cerrarse y sin pensarlo el sólo arranco, ¿Como era posible que el hombre que había estado conmigo durante estos 17 años no mirará atrás? Toda vía no lo se, fue la última vez que lo vi. Los días siguientes después del abandono de mi padre, vi como mi madre se perdía en alcohol, me sentía tan impotente.

El lunes, tres semanas después de que me quedará sin padre, escuche a mi madre hablar por su celular, estaba llorando y por un momento creí que hablaba con él, pero luego escuche que hablaba con Roger, el médico de mi "familia" y sólo lloraba y decía no... no me puedo mo... y rompía en llanto, cuando escuché la palabra morir, entendí que mi vida se terminaba, estaba sin padre y muy pronto me quedaría completamente abandonada, no me pude contener y solo sentía mi cara mojada por las lágrimas que rodaban en mis mejillas mientras en mi cabeza sólo existía una palabra: Muerte.