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Capitulo Final (Parte2)

capitulo final

parte 2

Llegamos a la iglesia en menos de cinco minutos y mi papá me estaba esperando sentado en una banca. Parecía pensativo.

-buenos días. Disculpe, ¿no ha visto a un señor alto, moreno de ojos verdes con el cabello castaño ondulado por aquí? Es que no le encuentro.-dije bromeando para que se diera cuenta de mi presencia.

-claro que si, dijo que iba a buscar a su hija.-dijo él siguiéndome mi juego.-siéntate un momento a mi lado.-dijo y adivine lo que venía a continuación.

-claro papi, siempre tendré tiempo para ti.-dije y me dispuse a tomar asiento a pesar de este vestido que no me dejaba ni tomar un pocito de aire.

-mi princesa, sabes que siempre estaré a tú lado para lo que me necesites. Se que esto te aburrirá un poco, pero aun quedan diez minutos para tu boda, y no creo que prefieras ir con tu madre a que te ponga los nervios de punta dándote consejos para la nueva etapa de tu vida ¿o si?-dijo suponiendo lo correcto. Yo solo asentí para que él continuase con su platica. Disfrutaba escucharle, y ahora era un buen momento para estar a su lado.- Aún recuerdo cuando te cargaba en mis brazos, cuando tenía que cambiarte los pañales. Era asqueroso. Pero lo hacía por amor a ti, y para darle un momento de descanso a tu madre también claro, pero bueno, eso no es el tema. Lo que quiero decirte es, siempre estuve, estoy y estaré para ti. No importa la hora, el día, el momento o la circunstancia en la que estemos, siempre podrás llamarme y enseguida tomare un vuelo para ir a verte. Como lo he dicho antes, eres y serás mi princesa. No sabes lo feliz que me hizo tu madre al regalarme a una pequeña, contigo aprendí tantas cosas. En verdad agradezco que me enseñaras a ser un buen padre, un buen hombre y un muy feliz papá. Contigo aprendí a controlar un poco más mis celos, aprendí a ver el mundo desde otra prospectiva, a no ser tan enojón y a dar muestras de afecto más a menudo. Eres… eres la mejor muchacha que he conocido, y estoy muy orgulloso de ti.-revisó su reloj en su muñeca izquierda y abrió los ojos como platos.-es hora de avanzar linda, falta un minuto para que empiece la misa.-dijo y se escucharon las escandalosas campanadas anunciando el evento próximo.

-claro papá. Además, yo también quiero decirte algunas cosas.-dije y empezamos a caminar.-ya que estamos sentimentales, quiero decirte que no me imagino a un mejor papá para mí. Eres y serás mi modelo a seguir, cuando tenga tu edad, quiero ser una gran mujer y tener la sabiduría que has conseguido.

-y ser muy guapa como yo a mi corta edad de treinta muchos.-me interrumpió para bromear y asentí riendo.

-en verdad que eres el mejor, te amo.-dije y le di un abrazo. Nos quedamos así por unos diez segundos hasta que la música de la marcha nupcial nos saco de nuestro trance.

Me miro y me dedico una sonrisa, la cual me dio la confianza necesaria para continuar caminando.

Llegamos al final de corredor y subimos tres escalones para llegar a donde Niall, quien estaba hecho un manojo de nervios. Sonreía como nunca y sus ojos brillaban más de lo común.

-Ay de ti si lastimas a mi bebe.-le advirtió mi papá a mi futuro marido. Lo dijo entre amenazándolo y bromeándolo. Me quede parada en mi lugar, a lado izquierdo de mi rubio.

Reímos discretamente los tres y el tiempo parecía correr muy lento.

-la cuidare más que a mi vida señor.-contesto Niall dejando a mi papá tranquilo.

-les deseo lo mejor.-dijo mi padre y después se le unió a mi madre que estaba en la banca más cercana a nosotros.  

El padre empezó a dar la misa.

-¿ya te dije que te ves hermosa vestida de blanco?-susurro el rubio provocando que me sonrojara como era de pensar e ignorando el sermón del sacerdote.