Lena sonrió al ver la interacción de Yulia con su mejor amiga y su vientre que comenzaba a notarse un poco más la morena acariciaba el pequeño vientre de la joven que le sonrió y sus ojos verdes se posaron en Lena que le sonrió, tras unas horas regresaron al departamento de la pelirroja, encontraron a la chica en la piscina con la enfermera
- ¿Todo bien? – Pregunto Lena
- S...Si gra...Gracias – Dijo Katya
- Perfecto, la comida está lista te esperaremos cuando estés lista
- Gra...Gracias – Le sonrióLena regreso al comedor donde todos la esperaban y tras unos minutos llego Katya acompañada de la enfermera que la llevaba en silla de ruedas sus músculos estaban un poco débiles y debía fortalecerlos de nuevo y el habla lo haría mejor con los días solo tartamudeaba un poco
- Que gusto verte recuperada – Sonrió Nastya
- Gr...Gracias
- Me dijo Lena que sabes que espero un bebé
- S...Si
- Ya conoces a Domen es mi prometido y por ende padre de mi hijo – Rio
- N...No fue l...la mejor for...forma de co...conocernos pero si – SonrióLos siguientes días Katya mejoró en su habla y aunque aún usaba la silla de ruedas ya comenzaba a caminar mejor y pronto dejo de usarla para traer un pequeño bastón la enfermera seguía al cuidado de ella, pero a veces Lena o Yulia le ayudaban con sus ejercicios
- Pronto ya no necesitaré tu ayuda – Dijo a la enfermera
- Lo sé – Sonrió
- No es que no lo agradezca, al contrario pero me hace feliz poder volver a ser yo
- También me alegra mucho doctora
- Pero nos veremos en el hospital cuando vuelva ¿no?
- Claro que si – SonrióLena se paseaba de un lado a otro en la sala su morena había salido con sus padres a comer y Sergey le había llamado a ella que necesitaba verla y eso la ponía sumamente nerviosa el timbre sonó al igual que su móvil y lo tomo al tiempo que aparecía Sergey y le hizo seña de que la esperara mientras atendía la llamada
- ¿Qué sucede? – Dijo Lena
- Johnson promovió un amparo, está moviendo cielo, mar y tierra para salir y tal vez lo logre
- A mí no me importa qué diablos tengas que hacer, incluso vender tu alma al diablo o la mía con tal de que ese imbécil se quede el resto de su vida ahí
- Lo sé, sólo quería avisarte
- Pues por tu bien espero lo mantengas dentro – Colgó furiosa
- Veo que solo malas noticias
- Dime que las tuyas son buenas – Lo miro
- Lamentablemente no Lena
- Dime – Lo invito a sentarse
- Pues veo que quiere salir a como dé lugar, pero también ha estado pidiendo ver a Yulia
- ¡No! – Bramó furiosa
- Lena por favor
- No Sergey ese maldito sólo destrozo la vida de Yulia y la mía y no voy a permitirle otro acercamiento a ella
- Dice que es importante
- Ni aunque viniese el mismo papa a pedirlo
- No eres católica – Rio Sergey
- Y aunque lo fuera, ni mi madre me haría ponérsela en bandeja de plata
- Platícalo con ella
- Ni loca, dile que no está interesada
- Insisto que deberías decirle y que ella decida
- Y yo he dicho que no
- Lena...
- ¡Mírala Sergey! Yulia ha vuelto a ser la misma después de tanto tiempo, ella está en paz y calma logro oponerse al hecho de que ese imbécil abusara de ella
- ¿Abuso de ella?Voltearon y se toparon con Katya que los veía sorprendida Lena la observo suspiro y espero a que la rubia llegara hasta ellos Lena camino de un lado a otro
- ¿Por qué dices eso Lena? – La miro - ¿Estás segura?
- El idiota de Dawn lo dijo
- ¿Solo por eso?
- Se le hicieron análisis y resultaron positivos – Dijo molesta
- ¿Puedo verlos?
- Katya...
- Por favor
- No sé dónde quedaron
- Es importante Lena
- BienLa pelirroja subió a su habitación y rebusco en sus papeles y encontró el sobre su mano tembló al tomarlo le hacía recordar lo horrible que pasaron y bajo hasta donde Katya la esperaba junto a Sergey, le entrego el sobre al pasar a su lado y la rubia lo reviso de inmediato no tardo ni diez segundos cuando dijo:
ESTÁS LEYENDO
Juegos de Seducción
Fiksi PenggemarEsta es una historia de una joven empresaria exitosa a corta edad que ha pasado por muchas cosas, su vida se volvió el trabajo por años hasta que conoce a una joven que se le resiste y hará de todo para tenerla en su cama, empiezan un peligroso jueg...