Tortura Mental [MikaYuu]

2.

*Biiip, Biiip*

Una fría mañana de Martes, 6:00 a.m para ser exactos, ese día volvía oficialmente a clases. Realmente tenía pereza de levantarme, estaba helando afuera y debajo de las mantas me sentía muy a gusto. No quería levantarme, realmente no quería.

Me giré y miré el reloj, 6:05 a.m. Podía descansar otros 5 minutos, ¿no?, Igual ya había cerrado los ojos y vuelto a dormir.

Miré el reloj nuevamente.

7:30 a.m

Mierda, ¿Cuándo había pasado tanto tiempo? sólo había cerrado por un momento los ojos, estaba seguro. 

No me daban ganas de ir al colegio, prefería seguir debajo de las mantas que me mantenían calentito.

¿Lo hago o no lo hago?.

Pero me voy a congelar fuera.

Pero debo ir a estudiar.

Pero aquí dentro se está muy a gusto.

Después de un lío mental y muchas vueltas en mi cama, pasados unos 10 minutos decidí levantarme.

Puse mis pies en el helado piso y sentí como un escalofrío recorría mi espina dorsal, mordí mi labio inferior por tener que soportar aquella sensación y finalmente me atreví a levantarme de la cómoda cama en la que estaba sentado. Medio dormido con mis pies descalzos dí unos pasos para adelante, los acomodé dentro de mis pantuflas y me encaminé hacia el baño. Con cada paso que daba mi cuerpo se despertaba más y cuando me dí cuenta ya estaba frente a la puerta del baño.

Abrí la puerta, entré, me giré y lo primero que ví frente a un espejo eran mis cabellos azabaches desordenados, grandes ojeras bajo mis ojos y un camino de saliva seca que bajaba desde la comisura de mis labios.

Realmente estoy hecho un desastre, y me reí de mi mismo.

Empecé a desvestirme, abrí la cortina y luego entré a la ducha, el suelo estaba seco, eso quería decir que mi padre seguía durmiendo. Cerré nuevamente la cortina y puse mi mano en la manija que abría el agua caliente y la dejé fluir, con el frío que hacía ni ganas me dieron de poner un solo dedo en la que estaba al lado.

Pasados unos 15 minutos desperté completamente y seguido caí en cuenta de la hora que era cuando me levanté, puse mi cara de pánico máximo, cerré la llave, abrí la cortina rápidamente, casi tirándola y salí de la ducha, y entonces mi cara de miedo aumentó.

No había traído una toalla.

Desesperado, cogí mi pijama y me lo puse de nuevo sin importar que se mojara, salí emparamado y mojando el piso del baño, agarré una toalla y me marché a mi habitación, me desvestí de nuevo y me sequé.

Ya calmado un poco dirigí mi mirada al reloj y me volví a azarar, Sólo tenía 25 minutos antes de que empezaran las clases.

Velozmente me puse mi ropa interior, pantalones, camisa, medias y zapatos.

La ropa adicional puede esperar.

Me fui corriendo nuevamente al baño que estaba empantanado, me cepillé los dientes y me peiné, volví a mi habitación y como no quería tentar a mi suerte, tratando de calmarme abrí mi mochila y revisé su contenido, todo estaba en orden.

Nuevamente me alarmé, me puse la corbata y el blazer y bajé corriendo las escaleras, tropezando y cayendo sentado por unas cuantas, ignoré el dolor y corriendo salí de la casa.

Hoy no habrá desayuno.

Corrí y corrí hasta la institución, mi pánico por llegar tarde el primer día era mas grande que las ganas que tenía mi cuerpo de descansar.