Capítulo 11.

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Otro día agotador como siempre. Al final, en el ultimo segundo, fui a la universidad. No podía permitirme perder más clases, y mucho menos dejar que un chico me afectara tanto -en el sentido de dejarme llevar por el amor.

Me encontraba sola en casa, algo que agradecía ta que podría tener un momento de relajación para mí sola.

Me tumbé en el sofá con una manta encima y con el portátil, y busqué una página para ver alguna película o serie; para así poder quedarme dormida y más tarde, estudiar descansada.

Un rato después, al no conseguir que ninguna página vaya en condiciones, decidí irme al cuarto a estudiar; esperando así que la tarde pasase rápido y viniera ya Zayn.

Unas cuantas horas después oí como se abría la puerta de la residencia.

-¿Zayn?, ¿____?- preguntó Niall al otro lado de la puerta.

No se  por qué, pero decidí esconderme entre la pared y el armario. Prefería evitarlo.

-¿Hay alguien?- volvió a preguntar.-¿____?- dijo abriendo la puerta de mi habitación. Soltó una gran bocanada de aire, volvió a cerrar la puerta, y se dirigió a su cuarto.

Salí de mi "escondite" y puse mi oreja sobre la pared para así escuchar a Niall. Para mi sorpresa, escuché sollozos.

Salí rápidamente de mi cuarto e intenté abrir ls puerta de Niall, pero había echado el cerrojo.

-¡Niall! ¿Puedes abrir?- pregunté golpeando la puerta. Segundos después me abrió la puerta.- ¿Estás bien?- pregunté preocupada.

-Claro.

-Niall...

-¿Qué?

-Te he escuchado llorar, ¿seguro que...?

-Yo no he llorado en ningún  momento.

-Ni- suspiré-. Tienes los ojos rojos y brillantes...

-Estoy colocado.

-No, no lo estás- negué.

-Ni que tú supieras sobre drogas...

-No, claro que no sé. Pero sí estoy segura que ahora no estás colocado, porque yo ya te vi anoche así; y ahora no lo estás. No intentes engañarme.

-Vete de mi cuarto y déjame en paz-gruñó.

-¿Por qué eres tan difícil de tratar? Sólo quiero ayudarte.

-¿No has pensado quizá que no quiero ayuda? Y menos la tuya.

-Por favor Niall, ¡mírate! Claro que necesitas ayuda. Deja de engañarte y hacerte daño s ti mismo por favor...

-No sabes nada de mí, ¡nada! ¡Así que lárgate de mi jodida vida!- chilló.

-No me iré hasta que me dejes ayudarte.

-¡Que te vayas he dicho, joder!- gritó a todo pulmón, a la vez que me daba un empujón y caía de culo contra el suelo y la pared.- Mierda...

Mis ojos se empezaron a aguar por el fuerte pinchazo que estaba teniendo en la espalda y el coxis, y por segunda vez en mi vida, estaba sintiendo miedo de verdad. Miedo de la persona que tenía ante mis ojos.

Niall se agachó y se acercó a mí, y por inercia, cerré los ojos; rezando para que no me pegara. Rezando para que no fuera como él.

-____.., ¿estás bien? L-lo siento muchísimo, no quería hacerte daño. Yo... - suspiró.- Lo mejor será que te alejes de mí, a veces no... No sé controlarme. Y no quiero hacerte daño.

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⏰ Última actualización: Feb 13, 2016 ⏰

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