Un ultimo deseo.

Historia I

No se donde estoy, no se que sucedió, no se quien soy.

Solo se que estoy dormida, y el silencio es mi compania.

Mis pensamientos tanto confusos como revueltos, no dejan de divagar preguntas.

Estoy muy confundida.

¿Qué se supone que tengo que hacer ahora?

Supongo que tengo que levantarme.

Y como lo pensé, coloque toda la fuerza de voluntad que tenia, y abrí mis ojos de nuevo, pero el paisaje había cambiado, también el ambiente.

Trate de levantar mi cuerpo, pero no podía, estaba adolorido y dormido, no me respondía.

No parecía la habitación de un hospital, parecía una casa, más que otra cosa.

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Gire rápidamente mi mirada al escuchar el crujir de la madera de una puerta, posiblemente, a mi derecha, en la cual se asomo una niña, de ¿Qué se yo que edad?

La cual corrió hacia afuera de la habitación en cuanto se dio cuenta de que la estaba mirando.

Suspire pesadamente, sentí un pesado ardor en mis ojos, pero no sabía a que se debía.

Pronto se escucharon pasos en la puerta a mi derecha, por lo que decidí mirar nuevamente.

Era una mujer, bastante joven y bonita, con la misma niña que habia visto, en brazos, ambas de cabellera marrón.

- Veo que has despertado ¿Te encuentras bien? - La voz de la mujer sonaba dulce, como si, estuviera tratando de tranquilizar a un bebe, que se habia asustado, al observar un perro, por primera vez.

¿Me encuentro bien?

No lo se, sinceramente no se nada.

- Estoy bien.. - Se formaron esas palabras por si solas, arrastrando cada silaba con una voz cansada y la mujer se sorprendio al oirlas, puesto que no esperaba alguna respuesta tan rapido, debido a que habia despertado en un lugar desconocido.

- Que bueno, ¿Tienes hambre? - Preguntó cortes mente? sin perder esa tranquila armonia en su voz, como temiendo a asustarme si hablaba de otra forma.

- ¡Si! - Contesté tratando de no elevar mi voz, por la hambruna que en ese momento parecia insaciable.

La mujer se mostro sorprendida por mi acción unos momentos, para después sonreir tranquilamente.

- Esta bien, te traere algo de sopa con fideos, quedate aqui, y no te muevas mucho. - Aclaro y advirtio antes de desaparecer, por la misma puerta, por la que se dio paso, con esa niña en sus brazos.

Supongo que confiar es lo unico que me queda ahora ¿No?

¿Porqué termine, en ese asqueroso lugar?

¿Un callejon?

¿Qué hice? ¿Qué hice para terminar así?

¿La memoria perdida?

¿Dondé esta?

¿Quién se supone que soy?

¿Una criminal?

¿Una pastelera?

¿Una persona despreciable?