dos

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Y sé que parezco loco diciendo esto, pero después de dos años sigo enamorado de tí.

Desde tu llegada al barrio, salgo todos los días al jardín y toco algo con mi guitarra. Bueno, también miro a ver si estás en tu porche.

Esta mañana me senté debajo de un árbol y miré hacia tu porche. Allí estabas tú, con un vestido rosa claro y leyendo un libro.

Prometo que moveré cielo y tierra si hace falta, para averiguar cuál era aquel libro que estabas leyendo y, así, leerlo yo también. ¡Podríamos comentarlo juntos!

Me gustaría ser lo suficientemente valiente para acercarme a ti y hablar, aunque no creo que me atreva.

Algún día lo haré. Te lo prometo, Angie.

Niall, xx

Letters to AngieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora