Soy Katherine Pierce

Katherine

Me sentía tan mal pero vamos, soy Katherine... No me importaba.
Ian me miraba en algunos momentos pero yo no le dirigía la mirada para nada.... Caminamos y llego el atardecer y era muy lindo, me había relajado mucho. De pronto Ian habló.
-Katherine.... -dijo Ian mientras nos sentábamos en el bosque un rato y yo me recostaba a ver las nubes.
-¿Si Ian? -dije de la manera más relajada posible.
-Porque te fuiste?.... Ya sabes, la primera vez.... -Ian se recostaba a mi lado.
-Sabes la respuesta... No sé por qué la pregunta -hable con los ojos cerrados.
-Me enamore de ti. -dijo Ian de golpe, lo que provocó que abriera los ojos.
-Pero la escogiste a ella, y no te culpo, la amas, es tu esposado , sé que quieres la eternidad con ella... Yo también quería eso.
-Fue una equivocación, debí haber ido contigo esa noche...
-Descuida, ya pasó... Todo cambio Ian -dije mirándolo
-Quiero que cambie ahora -Ian se acercó a mí y me besó.... Yo le seguí el beso y en un arranque de euforia y rapidez yo estaba sobre el...
Me besaba el cuello ferozmente y daba pequeñas mordidas, ambos nos quitamos la ropa y pasó lo que tuvo que pasar....
Después nos vestimos y seguimos caminando, creo que todo había mejorado... Nos reíamos de muchas cosas y anécdotas.
-Han existido licántropos? -dijo Ian mientras caminábamos.
-Si, en 1866.
-Y que pasó? -preguntó Ian
-Asesinó a mi mejor amiga... -dije con voz baja
-Como fue? -dijo Ian
-Fue en el pueblo donde vivía Damon, después de que lo mate por dejarme plantada en nuestra boda, el pueblo se dio cuenta de lo que yo era y que mi amiga era una bruja, entonces cuando ella me esperaba en el carruaje baje por una niña, le prometí que no tardaría y cuando regrese la vi en el suelo con un lobo sobre ella... No pude hacer nada.
-Oh Katherine, lo siento.- dijo Ian mirándome
-Descuida.... Espera hoy es noche de luna llena... -Dije abriendo los ojos.
-Y? -preguntó Ian
-Noche de licántropos jaja, hace años que no veo uno, y no quiero verlo, será mejor que apresuremos el paso, falta poco para llegar al camino.
-De acuerdo
Ambos caminamos, no había pensado que pasaría con Nikki y Paul al volver, pero no decíamos nada. La noche estaba cayendo, me quedé pensando que pasaría si encontrábamos a un lobo.