Por fin se acaba este estúpido día. No podía haber pasado más vergüenza en una misma tarde. Esperé a que los demás se cambiaran para luego entrar yo en el vestuario. El jefe seguía en el restaurante. Pero yo no quería ni verle, y menos después de todo lo que hice.
-¿Puedes tirar a la basura esto cuando salgas?-Preguntó Ji Yong. Estaba sentado en una silla mientras miraba algo en su ordenador.
-¿No es su camisa?
-Si, pero prefiero comprarme otra.
-Lo siento chef, de verdad.-Susurró.-Yo compraré otra.
-Deja de pedir perdón.
-Lo sien...-me miró con las cejas levantadas.-Perdón... Osea... Me voy.
Caminé hasta la puerta. Al bajar el escalón no fijé en que los cordones de mis zapatos estaban sueltos y tropecé con ellos. Un brazo me agarró antes de que cayera al suelo.
-¿Estás bien?-Preguntó T.O.P. Asentí con la cabeza.-Tienes que fijarte más en las cosas, ______.-Me extendió la bolsa.-Hasta el lunes.
-Adiós.
Antes de tirar la camisa le hice una foto para ir a alguna tienda a comprarle otra. Ya había causado muchas molestias quemando mi uniforme y no quería seguir haciéndolo. Al menos sabía que hacía algo bien... ¿No?
-No hagas ruido _____, estoy intentando estudiar y ni puedo concentrarme.-Dijo mi vecino, Xiumin. Uno de los tantos estudiantes que vivían en este edificio.-¿Qué se supone que haces?
-Sopa.-Susurré.-Estoy practicando para ser chef.
-¿Y no puedes hacerlo en el restaurante?
-Mi jefe no sabe que quiero ser Chef.
Suspiró. Él y yo nos conocíamos desde que llegué a la universidad. Ninguno podíamos pagar mucho y nos quedamos en estos pequeños apartamentos, que al menos podíamos dormir debajo de un techo.
-Pues no hagas ruido. Tengo examen el Lunes y quiero repasar.
-Lo siento.
-Buenas noches.-Besó mi mejilla.
-Buenas noches.
(...)
Llegué al restaurante. Era lunes. Un maldito lunes. Odio los lunes, y más si el día anterior no he dormido. Y curiosamente, no lo hice. No sé por qué. Entré como un zombie. Bostecé, como si fuera un hipopótamo sin saber que Daesung estaba allí.
-Buenos días a tí también.-Susurró mirando su móvil.
-¿Sabes dónde está el jefe?
-En el almacén mirando con T.O.P lo que falta para comprar.
-¿Chef?-Dije tocando la puerta.
-Entra.-Contestó.
-Tome.-Puse la bolsa delante de él.
-¿Qué es eso?-Preguntó.-No me hagas perder el tiempo.
-Es su blusa del trabajo señor.-Agaché la cabeza.
-¿Mi qué?-La cogió.-Te dije que la compraría yo.
-¿Y acaso la compró?
-No.
-Pues ya está.
-¿Me está elevando la voz?
-No señor.-Negué con la cabeza.-Lo siento.
-Das un paso para adelante y veinte para atrás.-Susurró T.O.P.
-¿Qué?
-Nada, ve a tu puesto.-Sentenció Ji Yong.