cuestiones del corazón

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Dicen que si una pareja no pelea no es amor, al parecer Alice y yo nos amábamos mucho, no se trataba de que peleábamos de cosas que podrían destruir poco a poco nuestra relación, era más una forma de conectarnos más profundamente y si las peleas eran por cosas que a veces eran muy absurdas.

Alice: Paco

yo: dime?

Alice: enserio comerás tanto picante?

Yo: pues si me gusta el picante.

Alice: pero no me gusta que comas eso

yo: a mí no me gusta que te amarres el cabello y aun así lo haces

Alice: no es lo mismo.

Yo: sé que no es lo mismo pero...

Alice: no Paco siempre crees que todo es lo mismo.

y cosas como esas no implicaba un caluroso debate en el que no tenía las de ganar(típico de la mujeres, siempre ganan) pero ciertamente el amor que embargaba mis pensamientos y mi corazón, era y aun es un amor puro, quizá cuestionable en muchas formas, cada uno tiene una manera distinta de mar a alguien y de demostrarla, Alice era y será una mujer muy importante, me ayudo a salir de una oscuridad que lleno mi vida de preocupación y temor.

algunos momentos junto a Alice fueron hermosos llenos de amor, ternura, peleas tontas y en algunas oportunidades solo quera llevármela lejos y estar con ella eternamente, pero la vida no es lo que uno cree o espera de ella, la verdad no se si se enamoró de mí, si llego a amarme, pero quizá ahora solo llegue a odiarme, muchos me preguntaron que este amor no podía ser existente, Alice era una mujer muy detallista, encerrada y protegida dentro de una burbuja quien elaborada y en la cual yo no podía entrar fácilmente, ¿que esperaba ella de mí? quizá no pueda responder esa pregunta, quizá espero más de mí, o tal vez no di lo suficiente, pero sé que dentro de mí, di lo mejor, lo que jamás pude otorgar a otra mujer más que a ella. Alice siempre me decía que no le demostraba ese amor, que mis palabras no tenían lógica, ¿pero qué se puede esperar de la vida más que la ilógica misma?

Yo: Alice te amo

Alice: (en un rotundo silencio me recordaba que las palabras no tenían sentido)

quizá este capítulo de la historia no les parezca un tanto triste, pero en toda historia hermosa y de amor existe esos momentos, cada mañana mientras salgo a correr hacia la playa, la recuerdo, animándome en todo, escucho su voz y me lleno de energía y cuando llego a la playa y veo que empieza a amanecer, la recuerdo más, puedo ver su rostro en el sol, puedo ver su belleza en el mar puedo ver que a lo lejos ella me espera, bajo la promesa que le hice cuando me fui, quizá vuelva a verla o quizá no, fueron palabras que mi cabeza no llegan a procesar, ¿quiero volver a verla?, esa respuesta es más que obvia, deseo tenerla en mis brazo y decirle al oído, que volví por ella, que aun a pesar del tiempo y todo aun la sigo amando como aquella vez que nos amamos por primera vez.

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Nuestra historia especialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora