Saga Elementos y Sombras III: Fuego Unificador

Capítulo 3

Aaron POV

La incesante discusión que se estaba llevando a cabo en la primera planta, se llevó el poco buen humor que conservaba en este día. No había podido dormido en toda la noche, pasa muy seguido desde que esta situación de las maldiciones inició.

Retiré suavemente el brazo que se posicionaba sobre mi cintura para dejarlo con delicadeza sobre la cama. Eric se revolvió un poco al no sentirme junto a él en la cama, pero finalmente abrazó una almohada y continuó durmiendo.

Suspiré cansado al ver el cuerpo musculoso del pelirrojo descansando sobre mi cama. Últimamente Eric ha tenido problemas con su Alfa Keith y con toda la manada, por pasar demasiado tiempo conmigo. Eric ha abandonado sus obligaciones como el Beta mano derecha del Alfa en su manada. Es triste ver que lo que era una imponente manada de hombres lobos, ahora no es más que un grupo de personas indefensas escondidas en una enorme mansión. Están todos allí, encerrados, sólo dos de ellos se arriesgan una vez al mes al salir en busca de comida para abastecer la lacena por todo el mes. Es este mismo método el que realizan tanto las familias Mythis como las humanas. Arriesgan su vida ante las maldiciones con la esperanza de traer comida para sus hogares.

Decidí tomar una ducha bajo el sonido de la ruidosa discusión y el estruendo de los rayos al golpear la tierra, últimamente es tan común que incluso he aprendido a ignorar los estruendos, pero las discusiones... Eso es otro asunto, a pesar de que cada día, nuestra casa parece un campo de batalla y las discusiones no cesan, aún no me acostumbro.

Me posicioné frente al espejo para observarme un momento. La superficie frente a mí, me enseñó mi reflejo. Aunque no quisiera aceptarlo, mi apariencia ha cambiado mucho: Mi musculatura ha aumentado aunque sigo siendo delgado, mi piel continua cubierta de esos pequeños lunares, pero ahora son más notorios debido a que no he recibido un rayo de sol en casi tres meses, tan sólo he recibido pequeños haces de luces que produce Elliot de vez en cuando para mantener la suficiente luz en su cuerpo ya que sin ella se debilita. Continué mi evaluación frente al espejo...

-La misma altura, siempre enano; el mismo cabello rubio y estas asquerosas ojeras.- susurré quitando mí vista del espejo.

Unas suaves manos se posicionaron en mi cintura y unos besos en mi hombro. No pude evitar sorprenderme, pero fácilmente reconocí la corta barba de Eric rasparme delicadamente a la vez que proporcionaba esos besos en mis hombros y cuellos. Dirigí mi vista al reflejo de nuevo y allí estaba el pelirrojo, tan guapo como siempre, incluso después de despertarse se veía radiante.

-Esa altura es perfecta, ese cabello es como oro derretido y esas ojeras las tenemos todos ahora...- Susurró en mi oído mientras me sonreía en el reflejo del espejo.

-Gracias...- susurré fijando mi vista en los ojos del reflejo de Eric, nos observé juntos, con sus brazos alrededor de mi cintura, con su barbilla reposando en el espacio entre mi cuello y hombro derecho, con su sonrisa hermosa, sus piernas fuertes, sus sexys bóxers negros... ¿Sus bóxers...? ¡Mierda!

-¡Eric!- Me aparté a toda prisa del contacto del pelirrojo

-¿Qué sucede?- Preguntó confuso con una sonrisa pícara.

-¡Estoy desnudo!- Grité mientras con las palmas de mi mano cubría mi miembro expuesto.- ¡No mires!- sentí mis mejillas enrojecer me obligué a calmarme

-¿Sabes?- Siseó el hombre lobo aún con su sonrisa pícara- Me encanta cuando puedo ver alguna parte de aquel que solía ser el antiguo Aaron, así: Tímido, sonrojado y tierno- Dijo mientras intentaba acercarse a mí

-Ese chico murió hace mucho- Dije fríamente eliminando el rubor de mis mejillas o cualquier emoción en mi interior –Si eso era todo lo que querías decir, puedes irte ya. Si el caso era que buscabas tener sexo, ya sabes mi respuesta: NO. No quiero tener relaciones aún, así que calma tus asquerosas neuronas.- Le escupí con sorna mirándolo directamente a los ojos.