Capítulo II

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Esperaba en la entrada de la casa de los abuelos a que papa llegará,  mis maletas estaban acomodadas a un costado mio,  recuerdo que tenía puesto un hermoso vestido de flores que me llegaba hasta las rodillas  en mi cabeza tenía un lindo listón rosado qué sostenía mi enorme cabellera lejos de mi pequeña  cara.

Al ver como el auto de papa se iba acercándose a la casa llame a los abuelos,  ellos salieron a despedirme  mientras papa subía las maletas al portaequipajes  del auto.

La abuela me decía que muy pronto nos veríamos en mi recital donde yo sería una una hermosa mariposa y el abuelo le decía a papa que como iban las cosas en la empresa,  ellos siempre hablaban de cosas de negocios que yo no entendía.  A mi  se me hacia muy raro que mamá no estaba con el se supone que los dos irían por mi.

-papi  y mamá donde esta.

-lo siento querida ella tubo que ir con el médico por que estaba un poco enferma cuando lleguemos  a casa ella estará ahí.

-hijo valeria se encuentra bien.
Pregunta mi abuela muy preocupada.

-si mamá ella tenía un resfrío nada grave,  ya sabes como esta la contaminación  en México qué le ha provocado un  poco de malestar.

-espero que se recupere pronto da le nuestros saludos hijo y que les valla bien en la carretera.
Hasta pronto dani  nos vemos en tu recital en unos meses mi niña.

Dice mi abuelo besando mi frente, yo solo asiento mientras mi abuela me da un fuerte abrazo,  subo al auto junto a mi padre y al ir ya avanzando  hacía la carretera saco la cabeza por la ventana sacudiendo mi mano diciendo adiós a mis abuelos.

El camino a casa fue silencioso,  mi papá nunca ha sido de muchas palabras siempre sabia que decir en el momento indicado,  al pasar unas pocas horas llegamos a la casa donde no espere a que bajará papa del auto y salí corriendo rumbo a la habitación  de ellos para ver a mi mamá.

Al entrar a la enorme recamara la veo sentada frente al tocador y corro  hacia ella,  se encontraba    de espaldas a mi lo único que puedo hacer es abrazarla por la espalda mientas le digo cuanto la extrañe y  siento como empieza  a llorar en ese momento.

-mami! Mami!  Te extrañe mucho.

Digo siguiendo abrazándola cuando logro verla a la cara puedo ver como tiene un golpe en la barbilla.

-mami qué te paso ahí.

Digo señalando su barbilla.

-nada pequeña,  no te preocupes que me he caído con los tacones el otro día y no he podido ni meter las manos  pero ya estoy bien,  ahí mi pequeña no sabes cuanto te extrañado.

Dice mientras me abraza y acaricia  mi cara,  después de saludarla subo a mi  habitación a preparar mis útiles para las clases.

Yo asisto a un colegio católico,  donde se me enseñan las clases normales y al terminar nos dan dos horas de catecismo,  al salir mi mamá me lleve a las clases de francés y de ahí a las clases de jazz todo el día estoy fuera de casa asta la tarde es cuando regreso.

Los días pasan tranquilamente  como de costumbre,  nada es diferente mamá no se ha vuelto  a caer.

La siguiente  semana mi mamá se a sentido un poco mal al ir al doctor nos dicen que ella esta embarazada,  con ansias esperamos a darle la noticia a papá eso lo pondrá muy feliz.

Cuando papá  se entero se puso muy contento por la noticia pero a mi me empezó  a regañar por cualquier  cosa pero mi mamá decía que era por que tenia problemas en el trabajó.

Ya faltaba poco para mi recital estaba muy contenta de que vería a mis abuelos de nuevo un día llego mi papá y empezó a gritar cuando le dije que si le habían llegado las invitaciones para que asistieran.

-ya me tienes harto,  estoy cansado  de ti que no entienden tu y la estúpida de tu madre que no quiero ir a un fastidioso recital,  cuando todos mis amigos van a los partidos de fútbol de sus hijos y yo teniendo me qué conformar con una estúpida niña.

Me dijo mientras que se dirigía a su despacho,  nunca me había hablado de esa forma,  yo corrí a mi habitación y me tumbe en la cama a llorar tenía que hacer algo para que mi papá  no se sintiera así,  mañana  me inscribiría al equipo de fútbol  de la escuela si eso haría.

El día de mi recital  todo salio muy bien los abuelos estuvieron e  primera fila,  ellos al igual que papá  se pusieron muy contentos por la noticia de que mamá  esperaba un bebé.

Los días pasaron y como lo había dicho ya formaba parte del equipo femenino de la escuela era una de las mejores,  me esforzaba para poder ser la mejor y mi papa estuviera  contento y feliz con migo.

El día que me dieron la invitación  a mi primer partido fue tanta mi emoción que espere a mi papá en las escaleras en el escalón más alto cuando llego a mi lugar le tendí la invitación mientras la veía yo sonreía por fin iba a estar contento.

-Daniela  qué demonios es estos.

-me inscribí  al equipo  de fútbol  con tu dijiste que los hijos de tus amigos jugaban yo quise hacerte feliz.

Le digo con una enorme  sonrisa, pero su reacción no fue la que yo quería.

-me harías muy feliz si tu hubieras sido un niño,  pero que no entiendes que esto es para hombres no para nenitas como tu.

-pero papá (no pude terminar de hablar por que su mano se impacto con una fuerza sobre mi mejilla qué lo único que pude hacer fue sostenerme del barandal  para no caer por las escaleras)

-vez lo que me haces hacer niña,  lárgate de mi vista y olvídate  de esa estupidez del fútbol.

Esa fue la primera vez y espero que la última que reciba un golpe por parte de el.

Feminicido. #PGP2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora