Querida hermanita no nacida

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El doctor lo llamó aborto involuntario...
Recuerdo que mencionaron que era un embarazo muy delicado, pues mamá lo había intentado muchas veces antes y jamas lo había logrado. Esa mañana, papá estaba demasiado ebrio de la fiesta en casa de los Greyson la noche anterior, así que salimos a visitar a nuestra abuela Coraline, al sur de Sacramento. Tu hermano, Phillip, cantaba en el asiento del copiloto a todo pulmón One de U2, su banda preferida, mientras que yo lo coreaba; mamá solo nos volteaba a ver de vez en cuando para reírse y cantar las partes que recordaba. Nos faltaban unos 5 Km para llegar casa de la abuela, cuando nos impactó ese auto por la izquierda, justo en el lado del piloto.

No recuerdo mucho, solo una luz blanca cegadora y al despertar estaba en el hospital con unas costillas rotas, Phillip solo se golpeó la cabeza y se abrió el labio inferior. Pero mamá... ella se llevó la peor parte.
Recuerdo escuchar al doctor Mayer, nuestro medico de cabecera y especialista en el embarazo de mamá, decirle que te habíamos perdido. Fue una mezcla de dolor, horror y desesperación que transformo su cara, que estaba segura que se arrancaría todos los tubos e intravenosas que tenía en el cuerpo y saltaría por la ventana. Solo me quedé en un rincón de la habitación, llorando y maldiciendo. Y justo cuando pensé que habíamos pasado lo peor, no tenia idea de cuanto me había equivocado, pues todo comenzó a ir cuesta abajo.

Yo soñaba con cargarte al llegar a casa y llevarte en mis brazos a tu pequeña habitación rosa, que Phillip, papá y yo pasamos horas decorando: dibujando pequeños elefantes por las paredes que soltaban flores de colores por la trompa; soñaba con verte dar tus primeros pasos, con tomar tus pequeñas y delicadas manos mientras te llevaba a tu primer día de escuela, con arrullarte y contarte cuentos para dormir: con verte crecer, pasando por todas esas etapas que yo pase y no tuve una hermana mayor con quien compartirlas. Tu primer enamoramiento, tu primer beso, tu primera mejor amiga, tu primera enemiga, los secretos que me contarías, y esas noches en las que buscarías mi cama porque no podías dormir. Ya te quería y jamás te vi, ni te escuché hablar.

Teníamos tanto que hacer juntas, y ahora solo queda imaginarme el "que hubiera sido" que jamas sucedió. Hasta nunca, pequeña Liz.

Sinceramente, Juliett

N.A. Hola pequeños y hermosos lectores!💘 Hemos llegado al final "Sinceramente, Juliett", y antes que nada quisiera agradecer a todos los que estuvieron desde el comienzo, dándome todo su apoyo y compartiendo esta historia con sus amigos. Jamás pensé que llegaría a haber tantos comentarios tan lindos acerca de mi trabajo, y no tengo palabras para describir lo mucho que me alegra saber que esta historia llegó tan lejos, al punto de que las personas pudieran identificarse con los personajes. 💘 Nuevamente gracias, y espero volver a hacer otra novela pronto. Los adoro, gracias. 💘

-Sinceramente, Fa 💘

Sinceramente, Juliett.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora