-A partir de este momento ustedes son libres. -Fueron las palabras que escuchamos de parte de Damian, estábamos sorprendidos y hasta pensamos que habíamos escuchado mal, no veíamos unos a otros tratando de comprender pero nos quedamos parados en el mismo lugar pues hasta pensé que podía ser una mala broma.
Bell: disculpa escuche mal o ¿dijiste que somos libres?
Damian: escuchaste bien Bell, yo los libero.
Bell: pero ¿cómo? ¿Nos compraste para liberarnos? ¿Hay algún truco o algo así?
Damian: ¿dudas de mi buena fe?
Bell: No es a lo que me refiero.
Mary: ella tiene razón mi señor, creo que muchos no le hallamos lógica a esto.
Damian: bueno se los explicare de este modo, no soy partidario de la esclavitud como la mayoría de personas en regiones aledañas, así que los compre pero ahora les doy la oportunidad de decidir si quedarse aquí o tomar su propio camino o irse. Es mi forma de ser justo para con ustedes.
Otro hombre preguntó: -¿Y si decidimos irnos seremos marcados?
Damian: no, los esclavos son marcados cuando huyen de sus dueños y son atrapados, yo por eso los libero para que puedan decidir qué hacer con sus vidas.
-¿Se nos dará un caballo y comida si decidimos irnos?
Damian: abusas de mi buena voluntad, si deciden irse pues háganlo y váyanse, pero tampoco esperen que se les dé todo, si van a quedarse aquí será para trabajar a cambio de comida, techo y protección, nada se les dará de gratis.
- ¿Si iba a hacer esto por qué nos lo dice en las puertas de su mansión, ya lejos de la ciudad y de todo?
Damian: no puedo hacer esto enfrente de los ciudadanos, no todos los que se encuentran allí son habitantes de Elgin y prefiero hacerlo por mi seguridad y la de ustedes.
Todos se quedaron un momento pensando que harían, pero por mi parte fue la primera en decidir y di un paso al frente:
- Tú me ayudaste y a cambio te dije que te seguiría y que eso haré. Tu trato me parece justo y te serviré de la mejor manera que pueda.
Damian me dedico una sonrisa y asintió con su cabeza en agradecimiento. Los demás se quedaron callados un momento pero al final casi todos aceptaron, 4 de los hombres se fueron por que dijeron que no aceptarían órdenes de nadie pues no habían nacido como esclavos e irían en busca de sus hogares así que se fueron caminando hacia la ciudad. A los demás Damian nos agradeció por decidir seguirlo y nos invitó a pasar, las puertas de la mansión se abrieron para nosotros y pude sentirme tranquila al fin. La servidumbre de Damian nos ayudó a mostrarnos un lugar para bañarnos y cambiarnos, se nos dieron ropas nuevas, una comida pequeña que incluía pan, sopa y un vaso de agua la cual tomamos en la cocina del servicio, por ultimo nos dieron un lugar para dormir diciéndonos que descansáramos y que a primera hora nos requerían en el salón principal para decirnos que hacer. Nos despertaron a todos antes de que el sol saliera, de la misma manera nos arreglamos, desayunamos y con los primeros rayos del sol salimos al jardín para recibir nuestras órdenes. Damian y Alec nos esperaban allí, a cada uno se le fue dando sus nuevas obligaciones y dejados de una vez en sus puestos de trabajo, la mujer con su bebe fue asignada a la lavandería, los 6 hombres restantes fueron asignados 1 para jardinería, 1 herrero, 2 para los establos y 2 para futuros guardias. Mary fue asignada a la cocina, la hija de Mary y otra chica fueron asignadas como panaderas, la última chica como mucama y al final estaba yo, solo los seguía de un lugar a otro tratando de pensar cual sería mi trabajo. Damian me llevo a recorrer media mansión sin decir palabra alguna, solo caminaba y aunque quería preguntar algo me daba pena y pensé que Alec me volvería a regañar así que solo lo seguí, llegamos a un gran balcón el cual por medio de un puente conectaba a un jardín gigantesco lleno de lirios, era hermoso e impresionante, solo de verlo me saco una gran sonrisa. Me quede parada por un momento hasta que Damian se alejó así que camine rápidamente para alcanzarlo.
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It Never Ends
Fiksi PenggemarSiempre me negué a vivir esta vida, pasara lo que pasara, y aun así perdí contra el destino, fui tan torpe al pensar que tenía un lugar al cual pertenecer, que alguien esperaba por mí. Intenté cambiar mi vida con todas mis fuerzas aún cuando se...