No Soy Como Ellas ✔️ |En edición|

34. ¿Cuándo cambio la historia?

Melody

-¿Qué hacen ustedes aquí?- pregunto un señor con ojos verdes, altura alta y cabello castaño claro. Era como un retrato vivo de Mark. Mire a Mark y de nuevo al señor.

-¿Sería tu, que haces aquí?- dijo Mark.

-Te dije, que iba a ir a un trabajo peligroso e importante hoy- dijo el señor regañando a Mark, como un padre. Me miro por un momento para sonreír- Así, que ella es la chica- ¿la chica?- La chica con la que tiene primera vez una cita formal- dijo sonriendo mirando Mark.  Mark desvío la vista ruborizando. ¿Su primera cita formal?

-Bueno, este viejo es mi padre- lo sabía desde el principio. - Y bueno ella es Melody- dijo Mark.

-Mucho gusto señorita- estrechamos la mano- Tenía muchas ganas de conocerte, aunque no de esta forma. Y dime Patrick.

-Mucho gusto Patrick, puedes llamarme Mel.

-Muy bien. Chicos es mejor que se escondan, vendrán los refuerzos para que acabemos con esto.- asentí. La verdad quería salir de este lugar que daba frío.

Patrick llevaba todo el equipo puesto, chaleco, pistolas, uniforme, tenía mucha curiosidad de tener un equipo así.

-Vamos Mel- me tomo Mark de la mano llevándome a unas cajas y nos quedamos ahí. Pero, hacia un maldito frío y luego traía un vestido. Gracias Amy.

Se escuchaba como se abría la puerta y se volvía a cerrar indicando que el padre de Mark, había salido. No me di cuenta que estaba empezando a temblar, porque Mark me abrazo sin decir ninguna palabra. No sabía, que decir. Mi cuerpo pareció que volvió a estar alerta y había unas mariposas revoltosas que sentía en mi estómago. Olía muy bien ese olor de Mark. Me arrincone más, haciéndome sentir como una niña pequeña.

Se escucho como abrían la puerta abruptamente y se escuchaban varios pasos.

- Registren el lugar. Y lleven se la mercancía que hay- se escucho una voz. Mark tiro de mi llevándome detrás de la estructura de madera. Y me pego a su pecho abrazando. Creo que no estaba concentrada en lo que pasaba, sólo en lo que hacia Mark. Parecía como una pequeña que dejarán que la protegieran.

-Tenemos que salir de aquí- susurro Mark todavía pegando me a su pecho.

Fuimos detrás de la estructura de madera, para no levantar sospechas. Habían dos vigilando la entrada de seguro también había en la salida.

-Yo me ocupo de los dos y te aseguras de salir de aquí-asentí.

Entonces por eso, sabía pelear, su padre es policía.

Aprecio atrás de uno, lo agarro por el cuello dejándolo inconsciente al instante, cuando se percató el compañero. Quiso lanzarle un golpe, Mark lo esquivo hizo lo mismo agarrándolo del cuello y dejándolo inconsciente. No creí que fuera discreto para pelear. Era bueno.

Agarre la puerta y la abrí. No, me había equivocado, habían otros dos. He querido patear traseros, esto no pasa muy a menudo. Agarro mi brazo, aproveche el agarre le torcí el brazo hacia atrás. Y lo empuje hacia su compañero haciendo que cayeran los dos, al final le di una patada en la cabeza dejándolo inconsciente. Se abrió la puerta, saliendo Mark, miro a los dos que noquee y sonrió.

-Fue acto de la inercia- dije encogiendo los hombros y río el por lo bajó.

-Espera- agarre unas pequeñas pistolas que tenían los tipos guardadas- Ten- le entregue una a Mark, que miro extraño la pistola- No podemos estar así- dije recargando la pistola. Nunca había disparado una de verdad pero, he jugado con pistolas ya sean de agua, pintura, flechas y otros. Era uno de mis pasatiempos.