Criminal ~TERMINADA~ (Editando)

Capitulo 21

**SAM**

No puedo parar de llorar. ¿Qué es lo que hará ahora? ¿Qué es lo que haré yo? Si su propósito era darme temor, lo logró. Cada vez que se acerca a mi o me mira, siento escalofríos. Me duelen las marcas de cigarrillo que dejo sobre mi cuerpo.

-¿Qué es lo que haré contigo? Ya probamos de todo. Excepto por...- se gira y me mira.- para lo que tengo en mente es necesario que tú cooperes, para que sea placentero para los dos. ¿Ya cambiaste de idea, o seguirás rechazándome?

Se acerca de nuevo a mi. No tengo ni las fuerzas necesarias para mover la cabeza y poder mirarlo, y menos, para responderle.

-¿Ya no dirás nada? ¿No quieres que me joda, que me pudra, nada?.- dice riendo.

Se sube a la cama y hace que levante la cabeza.

-Mirate, estás demacrada. ¿Dónde quedo esa belleza en ti?

Desata los nudos de mis muñecas y mis brazos caen a los costados de mi cuerpo. Siento la boca reseca y adolorida, el cansancio me pesa, y ya no siento pena ni vergüenza porque él mire mi cuerpo desnudo.

-Ay, Samanta. Tu fuiste quien lo quiso por las malas, pero uno no aprende hasta que estas cosas pasan. Te lo vuelvo a preguntar, ¿te entregarás a mi como se debe o seguirás haciéndote la difícil?

No digo nada. Suspiro y las lágrimas se deslizan de nuevo sobre mis mejillas, él las limpia con su manos y me recuesta sobre la cama.

-¿Qué sucede contigo? ¡¿Por qué no me respondes, carajo?!

Me toma con una mano de la cara, apretando mis mejillas con sus dedos.

-Bien, si así lo quieres.

Se levanta y se quita la camisa. Logro ver de nuevo aquel tatuaje que abarca gran parte de su hombro hasta debajo de su codo. Me mira y sonríe.

-¿Te gusta?- mira su tatuaje y después me mira de nuevo.- hace calor aqui ¿no lo crees?

Se vuelve a acostar sobre la cama, a mi lado. Recarga la cabeza sobre mi hombro y siento si respiración sobre mi mejilla. Suspira y pasa la lengua por sus labios.

-Eres encantadoramente hermosa, mira esos ojos, son preciosos.

-Deja de hacerme cumplidos y dime de una vez que es lo que quieres.- lo escucho reir una vez mas.

-Ya te lo dije, quiero que te entregues a mi de buena manera.

-¿O qué?

-Haré lo que sea hasta la hora que sea para conseguirlo.

-¿Algo más?

-No, solo eso.

Cierro los ojos y paso saliva.

-Prefiero estar muerta.

-Hum. Suena muy bien.- abro los ojos. Saca una navaja y la levanta en el aire. Cuando la acerca rápidamente a mi, alzo los brazos y me cubro la cara con ellos mientras suelto un grito. Lo escucho soltar una carcajada y me descubro para mirarlo.

-No me atrevo a matarte, dulzura.

Se levanta y se viste. Lo veo tomar tambien mi ropa de suelo y la pone en la cama.

Me viste como si fuera una muñeca de trapo, como si todo lo que hizo estuviera olvidado, en el pasado. Cuando estoy vestida totalmente, él me sienta sobre la cama, se sienta a mi lado y me jala hacia él para después recargarme en su pecho.

-Todo esto pudiste haberlo evitado de cierta forma, Samanta.

Suelto un gruñido.

-Te voy a dar otra oportunidad y espero que la aproveches. Porque yo no doy segundas oportunidades, pero tú eres una chica especial y te la mereces.