Siempre en mi corazón

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Me miro por última vez en el espejo. Sonrío y alisto mi ropa por última vez para que nada se arrugue. Perfecta. Agarro mi bolsa y salgo de mi cuarto en camino a mi cita.

Abro mis ojos en el coche, simplemente no puedo creer que vaya a conocerlo, por fin. El día en que anunciaron en la radio "Gran concurso: Ten una cita con Jorge Blanco" casi muero. De inmediato entré al concurso, no fue nada fácil ganar, ¡Ja! todo lo que hice, pero eso es algo que otro día les contaré.

Siento mi estómago revuelto, creo que son las famosas mariposas. No puedo esperar al momento de tenerlo frente a frente. Sus ojos, su sonrisa, su voz, su dulzura, será hermoso, lo sé.

-Ya vamos a llegar, señorita. ¿Emocionada?- me pregunta el chófer.

-Sí. Mucho- le digo sonriendo.

Luego de unos minutos, por fin llegamos. El chofer me deja en la entrada del hotel donde me encontraré con Jorge. Un botones se acerca a ayudarme a abrir la puerta, le agradezco y camino hasta la recepción del hotel.

-Buenas noches, ¿En que puedo ayudarle?- me pregunta el chico de la recepción.

-Hola, tengo una cita con Jorge Blanco.-

-Ah, ¿Tú eres la ganadora del concurso?-

Asiento emocionada y el chico me sonríe, me he de ver tan extraña, con una sonrisa que no me la quita nadie.

-Perfecto, María ¿No?- Asiento otra vez. -Bueno, sólo tienes que ir al restaurante, el edecán te llevará a una mesa. Yo le aviso al Señor Blanco que ya estás acá.-

-Gracias.- Le digo un poco, muy, emocionada.

Es que no lo puedo creer, en solo unos minutos conoceré a esa persona que me ha hecho feliz de una y mil formas. Esto es tan mágico, primero que Jorge está aquí en Taumalipas y que haya querido estar en un concurso para conocer a una de sus fans, y que esa fan sea yo, es increíble.

Camino al restaurante y me presento con el edecán, me lleva a la mesa y me siento a esperar, o a agonizar, creo que en este momento ya no estoy respirando.

Siento unas ganas enormes de llorar. Voy a hacer mi sueño realidad. Jorge la persona que me ha hecho feliz de tantas maneras diferentes, la persona a la que más admiro y también a la que más amo estará frente a mí.

-¿Maria?-

Siento el corazón acelerado a mil. Unas fuertes ganas de llorar me inunda. Me volteo para ver a la persona que me llama.

Jorge.

Me levanto de la silla y le doy un abrazo que el corresponde inmediatamente.

-Hola, linda. ¿Cómo estás?- me pregunta.

¡Ay Dios! Su voz. Es tan hermosa, diferente a la televisión, un poco más ronca. Sigo sin soltarlo porque de ninguna manera planeo soltar mi mundo.

Siento la mano de Jorge sobarme un poco la espalda. Estoy llorando y ni siquiera lo había notado. Debo parecer tonta llorando como una bebé en este restaurante, Jorge debe de sentirse avergonzado.

Poco a poco me separo de él y lo veo lentamente. Me está sonriendo y es la sonrisa más hermosa que he visto en mi vida. No porque sea perfecta si no porque es la sonrisa más sincera y amable que he visto. Sus ojos verdes son tan dulces y llenos de vida y ¡Dios, Es tan alto!

-Jorge....- le digo en un susurro.

-Hola... Jaja... No llores.- me dijo agarrando mis manos.

-Ay... no puedo parar. Te amo tanto.-

JORSTORYSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora